Delincuencia
El enésimo precinto
Cuatro detenidos por apuñalar a un chino a la salida de «Distrito 1». La víctima ingresó grave en el 12 de Octubre y el karaoke ha vuelto a ser precintado
Una reyerta con un apuñalado grave vuelve a cerrar por tercera vez el polémico karaoke chino de Parla
El Consistorio estudia cómo clausurarlo definitivamente
El ya famoso karaoke El Cielo y el Mundo de Parla ha cambiado de nombre pero no de perfil. Distrito 1, como ahora se denomina este local de ocio cuya clientela está compuesta exclusivamente por la comunidad china y siempre ha estado envuelto en polémica por ser «tapadera» de todo tipo de ilícitos cometidos por chinos, está de nuevo precintado por el Ayuntamiento de la localidad a raíz de una operación policial. El suceso tuvo lugar hace algo más de dos meses y en esta ocasión no había, aparentemente drogas, timbas ilegales o prostitución de por medio. Esta vez fue una brutal reyerta originada en su interior por «luchas de poder», según fuentes policiales, y que acabó fuera con dos apuñalados, uno de ellos muy grave. Ocurrió el pasado 21 de junio y la pelea fue protagonizada por al menos siete personas, una de ellas menor de edad. Ya fuera del local, en la gasolinera situada en frente, sacaron armas blancas y acabaron por utilizarlas contra dos de ellos: Jianwei Xu y Jiangnan Zhou. El herido más grave fue el primero de ellos, que recibió dos puñaladas en el costado izquierdo, resultando perforado un pulmón, según fuentes policiales.
Enseguida se personaron en el local varias patrullas de la comisaría de la Policía Nacional de la localidad y los servicios médicos, que trasladaron al herido hasta el Hospital 12 de octubre, donde ingresó en estado grave y tuvo que permanecer varios días en la UVI. Los agentes comenzaron entonces la investigación del suceso, que no pudo cerrarse hasta un mes después, dado que algunos de los participantes, conocedores de la gravedad de los hechos, habían huido de Madrid. De hecho, fuentes policiales confirmaron ayer a este diario que todavía hay uno de los participantes que aún está «escondido» en Italia.
Y es que dar con los autores de la brutal agresión no fue tarea fácil. Los agentes de Policía Judicial de Parla, en colaboración con los expertos en delincuencia protagonizada por ciudadanos chinos (el Grupo V de la Unidad Central de Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documental, UCRIF) y la Brigada Central de Crimen Organizado, se pusieron manos a la obra. Tras el visionado de las imágenes captadas por las cámaras de videovigilancia de la gasolinera comenzaron a identificar a los autores. Si bien es cierto que estos agentes ya conocen a muchos de estos chinos, entregados desde hace años al mundo del hampa asiático, no fue tan sencillo dar con ellos. El paradero del más importante, el autor del apuñalamiento, era una incógnita hasta que descubrieron, tras diversas gestiones, que se encontraba en Valencia, según las mismas fuentes. Los agentes también tomaron declaración a varios testigos de la agresión así como las actas de reconocimiento de los agresores. A algunos no fue muy complicado encontrarlos porque se mueven por «puntos calientes» de Madrid capital o Parla. Una vez que tuvieron ya a todos localizados (en algunos casos también gracias a los dispositivos de vigilancia dispuestos por la Policía), se procedió a la detención de cuatro de ellos.
El principal agresor era Xiaolei Xu, de 28 años, a quien la Policía le imputa un homicidio en grado de tentativa. También fueron detenidos Shan Can Yi, de 30 años, Lon Chen, de 25 años y Zhiman Hu, de 24. Todos ellos muy jóvenes pero algunos ya «muy respetados» en el submundo de la delincuencia china en Madrid. Y es que, según la Policía, la reyerta vino motivada por cuestión de egos, por «generar temor» entre sus compatriotas mediante actos de extrema violencia para «facilitarse futuros delitos de extorsiones, amenazas, robos, etc.»
No obstante, aún están pendientes de detener a dos participantes ne la reyerta que serán imputados por su implicación en los hechos.
¿Cierre permanente?
Ésta ya es la tercera ocasión en que El Cielo y el Mundo cierra por sanción administrativa, según fuentes municipales. Otras dos macrooperaciones policiales practicadas en 2010 y 2012 pusieron al singular karaoke chino en el punto de mira por estar implicado en la prostitución, las timbas ilegales y el tráfico de kin, la droga que consumen los chinos. Sin embargo, no se pudo demostrar que los dueños «supieran ni consintieran» nada de esto y sólo han sido sancionados con el cierre temporal del negocio. La nueva corporación municipal afirmó ayer a LA RAZÓN que tiene la intención de cerrar «de forma permanente» el karaoke, ya que siempre está envuelto en polémica y trae inseguridad al municipio. Los vecinos de Parla llevan muchos años quejándose de las peleas que se producen a las puertas del local y la «impunidad» de la que goza.
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