Europa

Madrid

El vasco que pilotaba «narcovuelos» en sus permisos penitenciarios

La Guardia Civil detiene a 20 personas de una red que importó 1.500 kilos de hachís en helicópteros. Tenían casi 400 kilos en un trastero de Vallecas

Los narcos contaban con dos aeronaves. Una la habían alquilado en Francia y nunca la devolvieron
Los narcos contaban con dos aeronaves. Una la habían alquilado en Francia y nunca la devolvieronlarazon

La Guardia Civil detiene a 20 personas de una red que importó 1.500 kilos de hachís en helicópteros. Tenían casi 400 kilos en un trastero de Vallecas

Al igual que en las bandas dedicadas a alunizajes o a butrones hay «autónomos» contratados por distintas organizaciones para trabajos puntuales por su destreza en el uso la lanza térmica o en la conducción de riesgo al huir de la Policía, en el mundo del narcotráfico las bandas también se disputan a ciertos profesionales que son los «número uno» en lo suyo. Es el caso de un vasco que cumple condena en Martutene por su implicación en un cargamento de cocaína en un velero de EE UU. Aprovechaba sus permisos penitenciarios para atravesar la península hasta Sevilla y hacerse un viaje de ida y vuelta en helicóptero a Marruecos en tiempo récord. Cargaba en el país magerbí, descargaba en Málaga y seguía volando hasta Sevilla, donde escondían dos aerovanes (una de ellas la habían alquilado en Francia y nunca la devolvieron) en el pueblo de Los Palacios. Se sacó el curso de piloto en EE UU, aprendió a manejarse durante años en un atunero y ahora es de los mejores, todo un experto en los llamados «narcovuelos».

Nasser, marroquí de en torno a los 45 años, era el cabecilla de la organización que ha sido desmantelada por la Guardia Civil y se ha saldado con 1.500 kilos de hachís aprehendidos. Él controlaba todo (proveedores, distribuidores, transporte etc.) desde su chalé de Estepona. Gran parte de la mercancía llegaba a Madrid (en un trastero del Ensanche de Vallecas han cogido casi 400 kilos) y, desde aquí, se distribuía por toda Europa, según fuentes de la investigación. En la operación han sido detenidas 20 personas (españoles, marroquíes, rumanos y ecuatorianos), todos trabajadores de la «empresa» de Nasser. Pero sin duda el empleado estrella era el vasco. No cualquiera puede pilotar en las condiciones que se requieren: vuelos nocturnos y lo suficientemente bajos para evitar ser detectados por los radares. Podía cobrar hasta 100.000 euros por porte. Los investigadores destacan su pericia: llegaba a volar sin gafas de visión nocturna y nunca tuvo un percance grave. Y es que es habitual que estos pilotos tengan algún accidente, dado lo arriesgado del vuelo, y que acaben estrellados en cualquier montaña, como ocurrió con una aeronave el año pasado en Málaga y que los investigadores atribuyen a esta organización.

El porte del 5 al 6 de marzo fue el ultimo. Descargó en Estepona 750 kilos y, ya más relajado, siguió hasta Sevilla, donde fue detenido.