Contaminación en Madrid

«Indulto» de Carmena a las multas por contaminación

El Ayuntamiento devuelve a 5.330 conductores el importe de las multas por velocidad

Contaminación en Madrid / Luis Díaz.
Contaminación en Madrid / Luis Díaz.larazon

El Ayuntamiento devuelve a 5.330 conductores el importe de las multas por velocidad

No es una fortuna pero seguro que muchas personas se habrán llevado una grata sorpresa estas vacaciones al recibir en sus cuentas bancarias un ingreso inesperado: los 100 euros (50 en el caso de aquellos que se acogieron al pronto pago) por infringir los límites de velocidad hace año y medio. Fue entonces cuando el Ayuntamiento de Madrid activó el protocolo de medidas a adoptar durante los episodios de alta contaminación por dióxido de nitrógeno y estableció una limitación de velocidad en la circulación de 70 km/h en la M-30 y en las vías de acceso en el interior de la M-40, en ambos sentidos. Aquellos que infringieron estos límites que, de manera extraordinaria, se impusieron en Madrid, ahora ven cómo recuperan el dinero que pagaron ya que el Ayuntamiento de Madrid está empezando a devolver el importe cobrado. Así, el Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad está notificando la resolución de revocación de oficio del expediente sancionador y está solicitando la cuenta bancaria a los conductores sancionados para devolverles el importe de la multa. «El Departamento de Recursos de Multas de Circulación ha detectado la existencia de un error que ha motivado la revisión de oficio del referido expediente sancionador», expone en las cartas que está remitiendo a los usuarios. Es por esto que el Ayuntamiento «revoca el acto por el que resultó sancionado el destinatario de esta notificación anulando la sanción impuesta», puede leerse en las notificaciones que está remitiendo el área de Movilidad. En total fueron multados 5.330 conductores entre finales de diciembre de 2016 y en los meses de marzo y septiembre de 2017 por sobrepasar los límites de velocidad que se activaban cuando dos estaciones de la Red de Vigilancia de la Calidad del Aire (Ramón y Cajal y Barrio del Pilar) superaban los 180 microgramos/m3 de dióxido de nitrógeno (NO2) durante dos horas consecutivas y, a la vez, la previsión meteorológica era desfavorable. Si todos se hubieran acogido al pago con descuento, el Consistorio tendría que desembolsar, en el mejor de los casos, un 266.500 euros a los ciudadanos, a los que las devoluciones se están aplicando con intereses de demora.

La decisión municipal no ha llegado a los tribunales, se ha quedado en la vía administrativa después de que la organización de defensa de conductores Automovilistas Europeos Asociados (AEA) planteara recursos y alegaciones por las sanciones que se impusieron.

El presidente de AEA, Mario Arnaldo, ayer no ocultó su satisfacción por la anulación de las multas. «Celebramos que el Ayuntamiento haya reconocido su error en la imposición de las sanciones de velocidad con motivo de los episodios de alta contaminación y proceda a devolver el dinero indebidamente cobrado a los ciudadanos». Y es que «esto es una situación inédita, salvo que acudas a los tribunales, como ocurrió con la sentencia del Tribunal Supremo sobre las “multas en diferido” del Ayuntamiento a los conductores infractores, a los que no paraba para porque decía que carecía de medios para dar alcance a los conductores».

Arnaldo asegura que el límite permanente de la M-30 es de 90 km/h pero «en el caso de que la delimitación sea circunstancial se debería haber especificado por el centro de pantallas del Ayuntamiento la prueba fehaciente de la indicación existente en los paneles de señalización variable». Asimismo, hay que tener en cuenta que la M-30 tiene varios troncos con lo que los paneles deberían haber detallado en su momento «si afectaban a todas las vías de incorporación», añade entre los argumentos esgrimidos para defender a los conductores. No sólo AEA, sino también el RACE, estaban convenios de que la totalidad de las multas impuestas por exceso de velocidad o de aparcamiento iban a anularse. Y no sólo esas, sino también las aplicadas durante los días en los que se limitó la circulación de vehículos en función de su matrícula. Entonces ya animaron a los automovilistas a realizar los trámites necesarios para su condonación.

El RACE llegó a ofrecer a los conductores su servicio de recursos de multas de manera gratuita por la poca antelación de la información, la poca claridad de la misma, y las fechas navideñas en las que nos encontramos (muchos ciudadanos llegaron a la capital procedentes de otras ciudades a pasar las fiestas y no sabían con qué se iban a encontrar». Es por esto por lo que el RACE consideraba que las sanciones eran incorrectas y no cabía posibilidad de multar.

El Consistorio madrileño ha emprendido una cruzada contra la contaminación en el centro de la capital y quiere ahora que sean los distintivos ambientales de la DGT, en lugar de las matrículas, lo que determine el acceso de un vehículo o no al corazón madrileño porque se ven afectados menos vehículos que con el sistema pares/impares. No obstante, en el caso de las motos, afectaría a un número muy elevado.

La clasificación de la DGT de vehículos según sus emisiones contaminantes se completa ahora con la incorporación de motocicletas, ciclomotores, triciclos y cuadriciclos, una forma de discriminar positivamente a los más respetuosos con el medio ambiente que ahora resulta muy útil para el ayuntamiento para aplicar políticas restrictivas del tráfico en episodios de alta contaminación. Las motos anteriores a 2003 tendrán prohibido circular por el centro pero la cuestión es que 109.500 se encontrarían en esta situación de un parque de 335.709, es de decir, casi una de cada tres.