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La izquierda irá a segunda vuelta en la Complutense
La primera vuelta de las elecciones a rector de la Universidad Complutense terminó sin sorpresa. Los dos candidatos que partían con ventaja en las encuestas, Carlos Andradas y José Carrillo, revalidaron su condición de favoritos aunque algo lejos, sobre todo el actual rector, de los porcentajes augurados por los sondeos de la Facultad de Estadísticas publicados durante la campaña. No en vano, Carrillo sólo logró distanciarse de Federico Morán, el tercero con más apoyos, en el tramo final del recuento. Con este resultado, Andradas y Carrillo lucharán el próximo miércoles por convertirse en rector hasta 2019. La decisión de la comunidad educativa vuelve a demostrar su preferencia por los candidatos con un marcado perfil de izquierdas. Además de Federico Morán, ex secretario de Estado de Universidades, quedaron descartados de la «repesca» del día 13 Dámaso López y Rafael Calduch. La otra lectura de los datos de ayer habla de cómo, por primera vez en la historia de la UCM, en la segunda vuelta de los comicios no habrá ningún candidato que represente al centro derecha.
La victoria de Andradas fue clara ya que logró casi diez puntos de ventaja sobre Carrillo. En concreto, el vicerrector en tiempos de Carlos Berzosa se hizo con el 36,5% de los votos. Tras él, Carrillo consiguió el 27,4%. Se cumplieron a este respecto las previsiones de los equipos de los candidatos que apuntaban a la necesidad de alcanzar la barrera del 27% de los votos para conseguir superar el corte. Federico Morán no lo logró y su porcentaje de apoyos se quedó en el 22,4%. Tal y como pronosticaban los sondeos, Rafael Calduch, con un 7,9%, y Dámaso López, con un 5,3%, quedaron lejos de poder optar a la segunda vuelta. La clave que ayuda a explicar la victoria de Andradas es la amplia ventaja que logró entre los profesores doctores de los cuerpos docentes universitarios. La ponderación de su voto es del 51% del total, y aquí Andradas no tuvo rival logró 818 votos frente a los 547 de Federico Morán y los 502 de Carrillo.
Además de por el avance de los candidatos de izquierdas a la segunda vuelta, la contienda electoral de ayer destacó por la desigual participación entre los distintos sectores de la comunidad educativa. De los 77.187 estudiantes llamados a las urnas, sólo votaron 9.375, lo que ilustra el escaso interés y el desapego que sienten los alumnos hacia los órganos de gestión de la universidad. La abstención entre los estudiantes fue de casi el 88%.
El personal docente investigador con dedicación a tiempo completo, repartió su apoyo entre Andradas y Carrillo. El actual rector logró en este colectivo 256 votos, sólo cinco menos que Carrillo. Más descolgado, Federico Morán cosechó 114 sufragios. Entre el personal docente e investigador con dedicación parcial, se impuso Carrillo con 155 votos, por delante de Andradas (151) y de Morán, que logró 131 sufragios. Entre el personal de Administración y Servicios, Carrillo se impuso con comodidad con 1.340 votos. Muy lejos, Andradas logró 728 y Morán, 466. Finalmente, entre los estudiantes, Andradas ganó con claridad con 3.197 votos. Por detrás de él, Carrillo consiguió 1.819 y Morán, 1.737.
Tal y como ocurrió ayer, volverá a ser clave en la segunda vuelta la ponderación del voto de cada uno de los sectores que forman la comunidad educativa. En el censo de 86.858 votantes, el grupo más importante numéricamente es el de los estudiantes, que suman 77.187 personas, pero cuyo voto sólo tiene un valor del 25%. Una de las claves pasará por el apoyo que uno y otro reciban del personal docente e investigador que tiene una vinculación contractual permanente con la universidad. Son 2.633 personas y su decisión vale el 51% del total. El voto del personal de administración y servicios (PAS) integra a 3.810 personas, que tienen un peso del 12% en el resultado final. Inmediatamente después, se encuentran el resto de docentes e investigadores sin vinculación permanente con la universidad. En este grupo hay que distinguir entre los 1.077 docentes contratados a tiempo completo, cuyo voto vale un 10%, y los 2.151 profesores a tiempo parcial, con un peso del 2% en el resultado final.
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