Japón

La primera gatoteca de España, en Lavapiés

Los clientes podrán disfrutar de sus bebidas, como en un bar normal (no sirven alcohol), mientras acarician a uno de estos animales y disfrutan de su compañía
Los clientes podrán disfrutar de sus bebidas, como en un bar normal (no sirven alcohol), mientras acarician a uno de estos animales y disfrutan de su compañíalarazon

Tomarse un café mientras acaricias a un gato dejará de ser una cosa típica de Japón (donde las gatotecas, originales de Taiwán, comenzaron a popularizarse en 2004) a partir del próximo día 15. Porque en esta fecha es cuando está previsto que se inaugure en Lavapiés el primer «bar de gatos» de España, un local en el que los clientes podrán degustar sus consumiciones rodeados de pequeños felinos.

La idea, original del país asiático, se implanta ahora en la capital gracias a Eva, una amante de estos animales –de hecho, lleva dos de ellos tatuados en los brazos– , que pondrá a disposición de sus clientes ocho gatos que ha recuperado de protectoras de animales. Se trata, explica la empresaria, de que quien quiera pueda llevarse incluso a su gato preferido a casa previo «papeleo» para decidir la idoneidad del futuro dueño. Pero, realmente, el negocio de este bar (en la calle Argumosa, 28) está en las personas que se acerquen para recibir la compañía de Roco, Pixulina, Pulguita, Pancho, Vida, Surco y Alba, que es como han bautizado a los gatos, y que pagarán seis euros la primera hora en la gatoteca y diez céntimos más por cada tramo de diez minutos que permanezcan en el local con los felinos. La primera consumición –no ofrecen alcohol– está incluída y por las siguientes, asegura Eva, pagarán la voluntad.

Antes de entrar a formar parte de este proyecto, los gatos (cuya compañía, aseguran los japoneses, tiene efectos terapéuticos) han tenido que pasar su particular «casting». La dueña de la gatoteca española explica que no eligen gatos pequeños, que podrían ser peligrosos para los niños (el local está abierto a todos los públicos), y que el bar está regido por un decálogo de normas que impiden, por ejemplo, que nadie pueda coger a un animal «que no se deje».

El horario del establecimiento será el habitual del resto de locales de la zona: de 10:00 a 22:30 horas, excepto los lunes por la mañana, que serán de descanso.

Eva colabora con una protectora de animales, la Fundación Abriga, a través de la que impartirán en el bar clases sobre etología felina, investigación, desarrollo y fomento de lo que supone adoptar una de estas mascotas, así como toda la información sobre sus cuidados.