Conciertos

Ocean Colour Scene, pop con paisaje inglés

PARA NO PERDERSE. SALA LA RIVIERA. Dónde: Pso. de la Virgen del Puerto s/n.. Cuándo: lunes 22. Apertura de puertas, 18:00 horas. Cuánto: 23 euros.

Ocean Colour Scene, pop con paisaje inglés
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En los noventa llegaron a ser número uno de Reino Unido en el apogeo del «brit-pop». Y encajen o no en esa denominación, Ocean Colour Scene tienen en su haber unos cuantos hits: «The Riverboat Song» y «Mechanical Wonder» son temas de esos que cambian un estado de ánimo. Después de tres años de silencio, publican «Painting», un disco con aire nostálgico. «Bueno, es que las cosas van mal, o al menos es lo que dicen los periódicos», dice Simon Fowler al teléfono. En el álbum, y por hacer un juego de palabras con el título, que remite al arte (podría traducirse por «Cuadro» o «Pintura»), amplían la paleta de colores de sus sonidos. «Siempre tratamos de hacerlo, pero claro, con ese título estábamos obligados». ¿Y si fuera un cuadro, qué tipo sería? ¿Expresionista, abstracto, naturaleza muerta? «Humm... sería un Constable, definitivamente», dice Fowler con flema.

Y es que el disco es muy británico. Hay una canción titulada «I Don't Want to Leave England». «Me gusta mucho mi país, no sé si en España os pasa lo mismo...». Hay otra dedicada a los Juegos Olímpicos de Londres. «Claro, ésa la escribí mientras se celebraban. Supongo que recibí los estímulos y lo plasmé. Imagino que en ese caso tuve una actitud bastante impresionista». ¿Y «George Tower's», de qué trata? «Es sobre dejar Inglaterra. Hace referencia a una canción tradicional». Caramba, les ha quedado un disco conceptual sobre Reino Unido. «Puede ser una especie de... meditación».

Es posible que en los tiempos que corren hagan falta razones para reforzar nuestro compromiso con nuestro país. «Bueno, yo creo que hacen falta razones para reforzar nuestro compromiso con la humanidad», asegura Fowler. Las amenazas contra la humanidad no son pocas, incluso hay algunas con nombre y apellidos. Una de ellas mereció otra canción del disco. «If God made Everyone» habla de Anders Breivik, el asesino de 77 personas en Noruega. «Fue una noticia espantosa, yo no he visto nada igual. Me puse tan triste como enfadado. Es un tema surgido de la rabia», afirmó Fowler, que en la canción se dirige a él: «Si las víctimas eran hijos de Dios, ¿de quién lo eres tú?».

La programación de Festimad, que ofrece nada menos que 50 conciertos en tres semanas (www.festimad.es) incluye hoy a Sho Hai (Sala Penélope) y en los próximos días a Georgina (23 de abril), Daniel Minimalia (24), Juan Belda (25), Johnny Winter (26), Los Enemigos(27), The Lucky Dados (27), Rufus T. Firefly (2 de mayo), Arizona Baby (4) y Penny Necklace.