Ayuntamiento de Madrid

Otro proyecto urbanístico en el aire en Madrid: Carmena veta una laguna para surfear

Recreación del proyecot.
Recreación del proyecot.larazon

Todo estaba previsto para que los madrileños pudieran surfear olas de más de dos metros de altura el próximo verano. Una laguna artificial junto al Campo de las Naciones iba a hacer posible este sueño, que también planteaba la instalación de una playa de 20.000 metros cuadrados y de otros servicios. Finalmente no se llevará a cabo. El Gobierno de Manuela Carmena ha tumbado la iniciativa. El Ayuntamiento ha redactado «un informe técnico desfavorable a la construcción de la laguna con el tamaño necesario dentro de la ubicación originalmente prevista», tal y como informó ayer la empresa Wet Watersports.

El Gobierno municipal de Ana Botella había dado el visto bueno al proyecto: un complejo sobre una parcela de 100.000 metros cuadrados junto a Ifema, para la práctica del surf y en el que se incluiría una escuela para aprender. Su puesta en funcionamiento hubiera necesitado de una inversión cercana a los 10 millones de euros que iba a asumir por completo la empresa. Sin embargo, los condicionantes técnicos esgrimidos desde Cibeles han frustrado este proyecto, que, sin embargo, triunfa en otros puntos del mundo como Gales y, próximamente, en Texas. Estaba previsto que estas instalaciones albergasen hasta a 5.000 personas a la vez

Más allá del informe técnico redactado por el Ayuntamiento, el equipo de Ahora Madrid no contempló con buenos ojos la iniciativa cuando supo de ella tras su aterrizaje en la Alcaldía el pasado mes de junio. Su rotundo rechazo a que empresas privadas realicen actividades en suelo público cedido por el consistorio ha pesado más que la inversión, la creación de empleo y la actividad económica que esta iniciativa podría desarrollar en esta zona de la ciudad que todavía está en expansión.

Desde la empresa que iba a realizar esta inversión optaron ayer por informar de este «contratiempo» pero eludieron criticar la decisión adoptada por el Gobierno de Carmena. El equipo de ingeniería de la empresa se encuentra, según informaron, «evaluando ubicaciones alternativas» tanto en la capital como en otras localidades de la región con el objetivo de que los madrileños disfruten de una laguna similar, no ya el próximo verano, sino en el de 2017.

El veto de Carmena –que llega tras una semana marcada por el intento de limitar las carreras populares desde el consistorio– impedirá a la ciudad convertirse en la pionera en Europa de este modelo de negocio