Comercio electrónico

Redada contra pelucas y máscaras

Redada contra pelucas y máscaras
Redada contra pelucas y máscaraslarazon

La fiesta de Halloween pudo convertirse en una verdadera pesadilla para los clientes de un comercio en el centro de Madrid que vendía artículos de fiesta muy peligrosos. La Policía Municipal, a través de la Unidad Central de Seguridad 1, localizó estos artículos así como su punto de venta, un local en la calle Magdalena. Todos los disfraces, juguetes y demás elementos de fiesta detectados figuraban en la Red de Alerta del Instituto Nacional de Consumo y de diferentes comunidades autónomas por incumplimiento de las medidas de seguridad. Entre otros fallos, presentaban deficiencias en el etiquetado que homologa la calidad de los mismos y porque su uso pone en riesgo la salud de los consumidores.

En total, la Policía Municipal inmovilizó 1.630 artículos, que quedaron precintados y a disposición de la autoridad policial. Asimismo, la responsable del establecimiento fue imputada por delito de fraude, estafa y falsedad, puesto que tenía etiquetas falsificadas que colocaba en todos sus productos independientemente de si estaban o no incluidos en la Red de Alerta. Lo más grave de esta práctica es que muchos de los artículos estaban destinados a niños mayores de 36 meses y los compradores no tenían manera de saber si estaban homologados en materia de seguridad.

De este modo, el establecimiento ponía al alcance de sus clientes muñecas con cabeza de frutas que pueden provocar asfixia, muñecos luminosos cuya luz no respetaba las normas de seguridad en cuanto a intensidad, animales de peluche que se desmontaban en partes pequeñas provocando riesgo de asfixia, vehículos con aristas peligrosas e incluso pelucas de colores altamente inflamables.

Por este motivo, el consistorio madrileño ha centrado la vigilancia en todo tipo de artículos susceptibles de ser usados en las fiestas y celebraciones de Halloween que se desarrollan en colegios y en actividades con los niños como principales protagonistas. Se vigila todo tipo de disfraces, juguetes, adornos y complementos, dulces, e incluso pequeños artefactos pirotécnicos que se utilizan con gran profusión en estas fiestas. Los disfraces para menores de 14 años se consideran juguetes, por lo que deben tener la etiqueta CE de la Unión Europea, que garantiza que no tienen piezas pequeñas ni se inflaman con rapidez en caso de entrar en contacto con una fuente de calor.

El Ayuntamiento de Madrid, a través de los distintos departamentos de Consumo y Calidad y Policía Municipal, mantiene una constante labor inspectora para garantizar la máxima protección de los consumidores frente a la venta de productos prohibidos o peligrosos. En los controles se comprueba su adecuación a la legalidad vigente que garantiza que han superado los controles de calidad y homologación, que el etiquetado es correcto, y que no comportan riesgo de provocar accidentes imputable a su fabricación y distribución. Las incautaciones de esta semana corresponden a la campaña específica de vigilancia de los productos que se utilizan en las fiestas de Halloween y que se reactivará en breve, puesto que es habitual comprar productos similares en los mercadillos de Navidad.