Región de Murcia

Una mujer, con la ayuda de su hijo, intenta estrangular a un hombre para robarle

La víctima conoció a la agresora en un bar de copas a la que invitó a su casa una hora después

A. G. V.
A. G. V.larazon

La víctima conoció a la agresora en un bar de copas a la que invitó a su casa una hora después

La Policía Nacional detuvo ayer a una mujer, de 48 años, que con la ayuda de su hijo de 28, intentó estrangular a un hombre con la intención de robarle después de conocerle en un bar de copas de Murcia. La víctima, de 40 años, invitó a la agresora de nacionalidad lituana a su domicilio apenas una hora después de conversar con ella, con el objetivo de mantener relaciones sexuales.

Los hechos se remontan al pasado día 3 de diciembre, cuando el 091 recibía la llamada de auxilio de la víctima, en un notable estado de nervios, que relató que minutos antes dos personas habían intentado matarle en el interior de su domicilio.

Una vez en el lugar de los hechos, los agentes observaron que el hombre atacado presentaba múltiples lesiones en la cara, cuello y el resto del cuerpo, y explicó cómo intentaron estrangularle con el cable del cargador de un teléfono móvil, además de haber recibido puñetazos y patadas por todo el cuerpo por parte de una madre y su hijo.

Ante dicha situación, el hombre fue trasladado al Hospital Santa Lucía para recibir asistencia médica y, posteriormente, acompañado con protección policial a las dependencias de la Comisaría en la que interpuso la preceptiva denuncia.

Según el relato de la víctima, esa noche conoció a una mujer «atractiva» de unos 50 años, en un local de copas y que, tras mantener una conversación, se marcharon juntos en dirección a su vivienda donde continuaron con su «amistosa» charla.

Así, comentó que en todo momento la mujer parecía mantener otra conversación por mensajería con alguien, algo a lo que el hombre no le dio más importancia.

Una vez en su domicilio, el hombre relató que la mujer se dirigió a la puerta de entrada para facilitar el acceso al hijo de esta, a quien le había presentado anteriormente en el bar.

Sin mediar palabra, el joven comenzó a golpearle violentamente con puñetazos y patadas por todo el cuerpo y rodeando su cuello con el cable del cargador de un teléfono móvil para estrangularlo.

Tras conseguir zafarse del intento de asfixia, la víctima pidió auxilio a través de gritos por la ventana, lo que hizo que los agresores salieran huyendo no sin antes sustraerle dinero y joyas.