El Subaru Impreza regresa con un magnífico ‘restomod’

El Subaru Impreza 22B está de vuelta. Después de revelar unos primeros bocetos, la empresa británica Prodrive ha publicado nuevos detalles y las primeras fotos del P25, un restomod dedicado a la leyenda japonesa de los ralis.

Recreado con las mismas líneas que el modelo original, el P25 también es “especial” en cuanto al precio: para comprar uno de los 25 ejemplares previstos, hay que estar dispuesto a pagar 540.000 euros. Una cifra que, sin embargo, no es realmente sorprendente si se tiene en cuenta que un 22B original en perfecto estado puede negociarse por más de 300.000 euros en una subasta.

El eco del pasado

Los equipos de Prodrive han conservado el máximo de curvas y líneas del Impreza 22B. Se produjeron cuatrocientos veinticuatro para celebrar la victoria del fabricante en el campeonato de ralis de 1997. Al igual que el 22B de la época, el P25 tiene un enorme alerón trasero, una carrocería de tres puertas y la misma anchura de 1,77 metros.

Además, los faros son absolutamente idénticos a los del Impreza 22B, mientras que en el interior, Prodrive dice que se ha mantenido el espíritu del modelo original. Sin embargo, la firma británica ha añadido tapicería de cuero, Alcántara y fibra de carbono y una pantalla de alta definición para grabar las sesiones en pista y cambiar los modos de conducción.

Un deportivo moderno hasta la médula

Las verdaderas innovaciones son mecánicas con la incorporación de la suspensión McPherson, los amortiguadores ajustables, los nuevos muelles optimizados, los frenos más grandes y las nuevas llantas de 19 pulgadas.

Aunque es extremadamente similar al Subaru Impreza de hace 25 años, la carrocería del P25 hace un amplio uso de la fibra de carbono para reducir el peso total a menos de 1.200 kg. Y para reducir aún más el peso del coche, puedes pedir asientos más ligeros o eliminar por completo el asiento trasero.

A ello se añade un nuevo motor bóxer de cuatro cilindros y 2,5 litros capaz de desarrollar más de 400 CV. La transmisión es de tracción total y está asistida por una caja de cambios secuencial de seis velocidades con levas de cambio. Se ha añadido una función de control de lanzamiento derivada de los modernos coches de rally. Según Prodrive, el P25 puede acelerar de 0 a 100 km/h en sólo 3,5 segundos.

Antes de las entregas a clientes a finales de este año, el Subaru Impreza 22B del nuevo milenio pasó de la teoría a la práctica con un desfile en el Festival de la Velocidad de Goodwood.