Elecciones

Radiografía de Ortega Smith: El «animal político» que se borra en las siglas del partido

Vox propone a uno de sus fundadores para sustituir a José Luis Martinez-Almeida al frente de la capital

Ortega Smith
Javier Ortega SmithT. NietoLa Razón

El nombre de Javier Ortega Smith lleva ligado a Vox desde el mismo momento de su fundación hace prácticamente una década. Ahora, el exsecretario general y portavoz de la formación en el Ayuntamiento de Madrid se postula para sustituir a José Luis Martínez-Almeida en la alcaldía con una candidatura en la que, tal como subrayan los expertos, destacan más las siglas del partido que su propio nombre. Porque Vox es Ortega Smith y Ortega Smith es Vox. Al menos, de cara al 28-M. «Es un candidato que parte va con un partido que se dejó ver y tuvo mucho protagonismo con la moción de censura al Gobierno», señala Gabriela Ortega, directora de Estrategia en la Institución Educativa de Análisis, Liderazgo, Estudios Políticos y Humanismo (ALEPH). Un partido, añade, cuyas posiciones e ideas «están mucho más identificadas por la ciudadanía ahora que hace cuatro años».

Cuatro años que, por otro lado, han sido bastante convulsos, no solo a nivel nacional sino dentro del propio Ayuntamiento, ya que Vox ha pasado de prestar su apoyo al PP a mostrarse muy crítico con Almeida, empezando por el hecho de que el alcalde no haya quitado el Madrid Central de Manuela Carmena. Y esto, que tuvo lugar en 2019, fue solo el inicio de una continua negativa de su partido a aprobar los presupuestos –ante los que solo han dado su apoyo una vez– y que se consuma hoy con el bloqueo a la nueva normativa urbanística de la ciudad. Una continua lucha que, sin embargo, ha acabado en los últimos días con una mano tendida de Ortega Smith a Almeida, ofreciéndose a él mismo y a Vox como sustitutos de Ciudadanos en el nuevo gobierno municipal. «Para mí, Ortega Smith está afrontando estas elecciones siendo consciente de que tiene que jugar un papel, y es el que le imponen las siglas», asevera Ortega. Y esto, tal como indica la experta, está lejos de construir una política de propuestas y acuerdos.

«Según las encuestas, no es ni de lejos el candidato más conocido por los madrileños, así que, si la gente te conoce poco y tienes que posicionarte como una propuesta válida para estar al frente del Ayuntamiento, comunicas de una forma agresiva, con temas de contracampaña más que de campaña». Esto significa que, en lugar de hacer una campaña subrayando las necesidades de la ciudad y haciendo propuestas para solucionarlas o para mejorar, está haciendo «contracampaña, que es cuando la haces contra algo». En este caso, Ortega Smith «ha embestido de forma unilateral contra los menas, la inmigración y la okupacion, y no está proponiendo nada en realidad, simplemente dice que está en contra».

En este sentido, el profesor de Ciencias Políticas explica que «una campaña electoral siempre va de refuerzo, es decir, que quienes te quieren votar, vayan a votar, de activación, es decir, movilizar al electorado que no tiene decidido si te votará o si quiera si irá a votar, de conversión, es decir, de tratar de atraer votos de otros partidos, y de desactivación, es decir, tratar de enajenar a gente que vaya a votar por otros partidos para que no vote». Y, en este sentido, Ortega Smith con Vox es un perfil que tiene «poca capacidad de atraer a otros votantes que no sean los que iban a votar al partido fuera quien fuera el candidato». Esto, que en principio puede parecer una debilidad, para el politólogo Eduardo Bayón podría ser, a su vez, una fortaleza, «porque puede evitar fugas de ese tipo de votante al PP».

«El gran desafío al que va a tener que hacer frente este candidato durante la campaña es que el PP no llegue a la mayoría, porque ahí es donde el partido tiene la oportunidad de visibilizarse durante los próximos cuatro años», señala Ortega. «Si llega a mayoría el PP, Vox pasara desapercibido en Madrid ciudad durante la próxima legislatura». En la misma línea, Bayón apunta que el candidato «tiene que posicionarse en un debate político muy polarizado entre Maestre y Almeida», por lo que el desafío principal para Ortega Smith ante el 28-M es el de «ser protagonista» en un contexto en el que «el partido está desdibujado en cuanto a que ha perdido tensión competitiva o capacidad de amenazar electoralmente a un PP reforzado por la desaparición de Ciudadanos».

En el caso particular de Ortega Smith, Bayón subraya que «es un candidato con un perfil muy duro, muy para unos votantes que se identifican mucho con Vox, pero no para otros». Es, por ello, «un candidato para atraer votantes no del centro, ni de la izquierda, sino a la derecha de Vox. Un perfil para movilizar a los votantes, acompañado de la propia marca electoral, y para tener un papel más o menos relevante, o tener más o menos protagonismo en el futuro Ayuntamiento». De esta manera, Bayón asevera que «más allá de que ya haya sido concejal, creo que ha sido elegido para presentarse a la alcaldía más pensado en esos términos que en términos competitivos propiamente».

Asimismo, Ortega coincide en que se trata de un candidato que destaca por «ser un auténtico animal político». «Maneja estupendamente la comunicación, la oratoria, da muchos giros en el mensaje hacia lo que él quiere comunicar, así que como candidato tiene muchos puntos fuertes en este sentido», apunta Ortega. En cuanto a sus debilidades, la experta confirma que «pesan más las siglas del partido que él como candidato». «Si él hubiera querido resaltar como candidato debería haber hecho una campaña más llamativa», dice. Sin embargo, y aunque «igual en votos arrastra más Vox que Ortga Smith, a él no le veo un perfil que se vaya a a conformar con borrarse en las siglas de su partido».