Toyota RAV4 Hybrid AWD-i: tracción inteligente

La ayuda de un motor eléctrico trasero de 40 Kw proporciona mayor agarre en superficies deslizantes sin aumentar el consumo.

El Toyota RAV4 es uno de los SUV más veteranos en nuestro mercado, pues se comercializa desde 1994, con más de 8,5 millones de unidades vendidas en todo el mundo en sucesivas generaciones que han ido modernizando su aspecto y adaptándolo a las necesidades de un cliente mayoritariamente urbano. Desde el pasado mes de enero está en los concesionarios la quinta generación del RAV4 con motorización exclusivamente híbrida, un vehículo de 4,60 metros de longitud con un maletero de 580 litros de capacidad que ofrece ahora un novedoso sistema de tracción total eléctrico denominado AWD-i, a la venta desde 33.800 euros y un descuento promocional de 1.000 euros adicional.

La base mecánica del Toyota RAV4 Hybrid AWD-i es la última versión de la tecnología híbrida autorrecargable de la firma japonesa, un conjunto formado por la motorización Dynamic Force de 2.5 litros que entrega una potencia de 222 CV -4 CV más que la variante con tracción delantera-, garantizando una mejor respuesta cuando la superficie por la que circulamos no tiene una buena adherencia.

Las ventajas del sistema de tracción eléctrica AWD-i son bastante importantes, pues tiene un consumo menor de combustible en entornos urbanos, un funcionamiento más silencioso a velocidades elevadas y mejor tracción sobre superficies deslizantes. El incremento en la capacidad de tracción se logra con un motor eléctrico adicional de 40 kW en el eje trasero, que ofrece hasta un 30% más de par, que se distribuye en función de las necesidades, funcionando como un sistema de tracción delantera en condiciones normales, y hasta un 80% en las ruedas traseras si fuera necesario.

Mediante un botón se puede seleccionar el modo de conducción que mejor se adapta a las características del terreno –Normal, Eco y Sport- y los gustos del conductor, actuando sobre la dirección asistida, tacto del acelerador y freno, caja de cambios y distribución del par motor. A esto se añade un control automático de diferencial de deslizamiento limitado –modo Trail- que garantiza el mejor agarre en superficies deslizantes.

El Toyota RAV4 con el sistema de tracción total inteligente se comercializa en cinco niveles de acabado –Business, Advance, Advance Plus, Feel y Luxury-, con precios que parten desde 33.800 euros, lo que supone un incremento de 2.000 euros sobre las versiones con tracción delantera en el acabado de acceso Advance. En el equipamiento de serie encontramos el sistema multimedia Toyota Touch 2, climatizador automático bizona, faros y ópticas LED, llantas de aleación, pantalla TFT a color, sistema de arranque inteligente con botón (Push Start) y el completo paquete de seguridad Toyota Safety Sense.

La alimentación de los motores eléctricos se hace con una batería de hidruro de níquel de 6,5 Ah de capacidad dotada de un sistema de protección que conserva siempre un nivel mínimo de carga por si fuera necesario aportarla al tren trasero. El consumo medio de combustible homologado en estas versiones 4x4 es de 4,5 litros, y obtiene la etiqueta ECO con la que puede circular por áreas restringidas a vehículos de bajas emisiones y obtiene una bonificación a la hora de aparcar en zonas de estacionamiento regulado.