Artistas

Bravo

En agosto, Nino Bravo hubiese cumplido 79 años. Su destino ha sido, sin embargo, la juventud eterna y una familia enamorada

Lope de Vega era cura y mujeriego, Antonio Machado se casó con una niña, Miguel Hernández fue pastor. A menudo la faceta pública hace desaparecer la privada, que queda como detrás de un velo que emociona mucho descubrir.

Se cumplen 50 años de la muerte de Nino Bravo y, tal vez por su temprano accidente de coche a los 28 años, no imaginé que dejó una familia, dos hijas incluidas. He entrevistado a la segunda, Eva Ferri, y he comprobado que la intensidad de una vida no se mide por su duración. Nino amó la música y fundó dos bandas, Los Hispánicos y los Superson, en las que tocó y cantó mientras trabajaba en una joyería y en un restaurante. Tuvo una carrera artística de apenas tres años, y, sin embargo, no hay discoteca que no ponga sus temas, ni karaoke en que la gente no se desgañite con Noelia, Un Beso y una Flor o Libre. «América, América» se editó de forma póstuma y todo el disco fue un superéxito. En 1995, un álbum aniversario se puso en un millón de copias vendidas.

Luis Manuel Ferri Llopis (el nombre real del cantante) se enamoró de flechazo de Amparo Martínez Gil en una discoteca y quiso casarse en secreto, pero la presión de la prensa lo obligó a saltar por los tejados para evitar las fotos y a entregar finalmente las imágenes de aquella novia de tul blanco ye-ye, con pamela a juego. Era abril de 1971. Su primera hija nació en enero del 72 y en abril del 73 se mató en una curva de la carretera de Valencia. Cabría pensar que Eva Ferri no conoció a su padre, pero nos equivocaríamos.

Cinco meses después del accidente trágico se celebró en la plaza de toros de Valencia un macroconcierto con artistas de la talla de Mari Trini, Víctor Manuel, Fórmula V, Mocedades, Julio Iglesias o Manolo Escobar, con más de 20.000 asistentes. La recaudación íntegra fue el regalo a Eva María, nacida el 27 de noviembre de 1973.

La mujer reconoce ahora que «las canciones de mi padre han sido la banda sonora de mi existencia y el tema Vivir, que se editó tras su muerte, es el himno de mi familia». Amparo y las niñas escucharon siempre a Nino y las dos crías se parecen al padre por dentro y por fuera. La técnica ha permitido además que Eva grabase varios temas con su padre: «Nunca me he sentido más cerca de él que cantando juntos». En agosto, Nino Bravo hubiese cumplido 79 años. Su destino ha sido, sin embargo, la juventud eterna y una familia enamorada.