EH-Bildu anuncia que «se van de España», pero dejan a los presos

EH-Bildu dice que ellos también se van de España, ya que en Cataluña han dejando la puerta medio abierta y una patita fuera, por si viene el lobo. De la valentía de estos batallones vascos, ahora reciclados en fuerzas de intermediación de paz, nadie ha dudado; sus objetivos militares cuando estaban movilizados eran realmente de altura: un concejal enemigo tomando café. Pero creíamos que ellos ya no estaban en España, es decir, que era metafísicamente imposible que un «abertzale» viviese en España, aunque con la denominación de País Vasco, que disfrutaban ya en esa entelequia que ahora han bautizado como «política endógena» (nosotros, a lo nuestro). Pero al ver la puerta entreabierta, han dicho: ésta es la nuestra. En salir por la puerta de atrás son realmente unos maestros. Recordemos que mientras España se desangraba en la Guerra Civil ellos, los «gudaris», negociaban la paz con los «camisie nere» italianos, preservando, claro está, la autonomía que les dio la República. En el fondo, EH-Bildu no se quieren ir de España, sino que se quiere quitar de en medio dejando a sus «gudaris» tirados de nuevo. Se van, pero dejan 600 presos en la cárcel.