Restringido

La macro y el empleo, bien

La macroeconomía va bien. El crecimiento del PIB español se dispara. Ya nadie se asusta de hacer previsiones de un 3% de aumento para 2015. Sin embargo los expertos económicos siguen prudentes en sus previsiones sobre la evolución del empleo. Casi ninguno calcula que el paro baje del 20% sobre la población activa para este año. En este campo los expertos también se equivocan. España ha sido en 2014 el país de la Zona Euro que más ha reducido su paro en términos porcentuales y me atrevo a pronosticar un desempleo por debajo del 18% en julio.

Hay un dato que lo corrobora. Es la transformación de contratos temporales en indefinidos. Los últimos meses sindicatos y oposición, como no podían criticar la bajada del desempleo, criticaban la naturaleza del empleo. Decían que se creaban contratos precarios. Especialmente porque consideran que el porcentaje de contrataciones temporales es demasiado alto (más del 90%). Pero, además de que en los mejores años del boom económico, con el PSOE en el Gobierno, también fue así, la lógica del mercado indica que la contratación temporal es el primer paso de la recuperación del mercado de trabajo.

En efecto, los empresarios ante una perspectiva de crecimiento económico primero intentan aumentar la productividad de sus plantillas, poniendo en marcha su capacidad ociosa. Si la demanda sigue tirando, lo siguiente es el aumento de esas plantillas de manera temporal. El empresario es cauteloso y espera a ver si ese aumento de ventas se consolida. Por último, si llega a la conclusión de que el crecimiento será sostenido transforma esos contratos en indefinidos, que le asegura empleados más motivados y expertos. Antes no lo hace por miedo a que la demanda sea coyuntural y luego tenga que incurrir en los costes de despido. Por tanto, un buen índice adelantado de por donde va a ir la creación de puestos en los próximos meses es el de la conversión de contratos temporales en indefinidos.

Pues bien, un estudio de Ranstand demuestra que entre enero y febrero de este año se han convertido en contratos indefinidos 75.900 temporales; un 27% más que en 2012 y un 10% más que en 2014. La estadística indica que desde 2012 esa conversión ha ido aumentando en estos dos meses (55.612 en 2012; 66.239 en 2013; 67.430 en 2014). Los empresarios empiezan a consolidar plantillas; creen que el aumento de demanda de sus productos no es coyuntural; que será continuo y sostenido.

La macroeconomía va bien. Es verdad que el nivel de endeudamiento público es preocupante, casi el 100% del PIB. Pero las demás cifras se comportan razonablemente, incluyendo el déficit público. Con el euro y el petróleo baratos, España está en una buena posición. Se nota en el aumento del empleo. Ahora también se notará en el empleo indefinido. Las cifras de marzo nos lo confirmarán este lunes.