Gaspar Rosety

Mérito «delbosquiano»

La Razón
La RazónLa Razón

España ha dado un paso muy importante al ganar a Bielorrusia. A mi juicio, hubo un primer tiempo de belleza en el juego y de excelentes ideas en el equipo nacional. Era un partido de mucha trascendencia ante un rival que no ofrecía riesgos ante la opinión pública, pero sí peligros reales en aspectos de fútbol.

Por este motivo, debemos concienciarnos de que llegar a las fases finales se vuelve cada vez más complicado y se exigen más méritos a equipos como el nuestro. Del Bosque no tiene para elegir a los mejores goleadores de la Liga española porque casi todos son extranjeros. El Real Madrid, tradicional suministrador de nuestras grandes estrellas nacionales, tan solo aporta dos porque el resto son extranjeros y hasta la tripleta del Barça resulta no seleccionable. Además, Del Bosque se ha enfrentado a una dificilísima renovación de la plantilla después de varios años de grandes éxitos.

Me alegró especialmente volver a observar el juego colectivo y los destellos de calidad de Silva así como el crecimiento imparable de Morata, un joven con todo el futuro abierto a sus pies y la ilusión y la razón en su cabeza. Morata ha aumentado sus condiciones en un equipo de la trascendencia europea del Juventus y ha aprendido jugando que sus cualidades están aún por explotar.

Igualmente, celebro que Iker hiciera dos paradas en todo el partido, pero ambas de gran calidad y dificultad. Han pretendido enseñarnos que Casillas está para jubilarse cuando el que debía jubilarse es aquel que no entiende que no comulgaremos con ruedas de molino. Ni de triciclo.