Polillas, Xylella, Roya...

Tiempo de plagas, que se multiplican y que afectan a sectores agrícolas, algunos de ellos claves para España, mientras en la Unión Europea (UE) reducen el número de principios activos, lo que equivale a decir la variedad de productos fitosanitarios que se utilizan para combatir esas enfermedades. La polilla guatemalteca ha saltado a la actualidad en las últimas semanas por los focos que se han producido en algunas zonas de Galicia y Asturias. Afecta únicamente a la patata y, de momento, solo se han registrado casos en parcelas dedicadas al autoconsumo, sin que la polilla haya volado todavía hacia las áreas dedicadas a variedades comerciales.

En 2015, en España se produjeron 2,2 millones de toneladas de patata, y se exportaron 286.842 toneladas por un valor de 93 millones de euros. En noviembre del año pasado se conoció que la Xylella Fastidiosa había entrado en nuestro país, en concreto en las Islas Baleares. Por este motivo, hace unas semanas el Ministerio de Agricultura decidió prohibir la salida de material vegetal para plantación desde esta comunidad autónoma con el fin de evitar que salte a la Península. Esta plaga afecta al olivar, el viñedo y los frutales, incluidos los cítricos. Sólo la producción de aceite de oliva se situará esta campaña en 1,3 millones de toneladas, que a los precios actuales y tomando una media de 3.300 euros por tonelada, da una cifra de 4.290 millones de euros; se exporta aproximadamente el 60 por ciento de la producción.

En los últimos años han aumentado los casos de roya, que han dañado parcelas de trigo; por otro lado, la FAO ha alertado días atrás de su expansión por una gran parte del mundo. Y, mientras las plagas aumentan, los agricultores de la UE, incluidos los españoles, se quejan de tener menos medios para combatirlas porque desde Bruselas se restringe el uso de fitosanitarios.