Andalucía

Quédese, señor Rajoy

Quédese, señor Rajoy
Quédese, señor Rajoylarazon

Quédese y haga lo que tenga que hacer para responder a la confianza que hace un año y tres meses depositó en usted la mayoría de los ciudadanos que fueron a votar. Quédese y limpie lo que haya que limpiar dentro de su propia casa, de su propio partido, y todo lo que hay fuera de él, que no es poco, aunque algunos nos quieran hacer creer que la corrupción no tiene en España otro nombre que el de Luis Bárcenas. Y quédese, sobre todo, para abanderar desde la holgadísima mayoría parlamentaria que le otorgaron las urnas los cambios que son imprescindibles para que esta sociedad no caiga en el derrotismo y termine entregándose a los demagogos y salvapatrias, que lo único que de verdad saben hacer es pescar en río revuelto, en las aguas turbias que ellos mismos han agitado y agitan cada día en las calles para conseguir con el ruido lo que no han podido lograr con los votos. Quédese y en los casi tres años que le restan de mandato no piense en clave electoral. Olvídese de las urnas y céntrese en impulsar el cambio profundo, de gran calado, que necesita España. Usted tiene el encargo de pilotarlo, y el tiempo de los paños calientes ya ha pasado. Ha pasado para usted, y ha pasado para una oposición que no aprende de sus errores y no hace otra cosa que practicar el cuanto peor, mejor. Los mismos que dejaron el país hecho unos zorros y que exigían permanentemente a los populares que arrimaran el hombro mientras arrasaban con todo no tienen autoridad moral ninguna para exigir al jefe del gobierno que se vaya. El PP y el Gobierno tienen un problema de credibilidad monumental. Pero no es menor el que atesora el PSOE de Rubalcaba. El PSOE de los cientos de millones que han volado con los falsos ERE en Andalucía, de lo que ya casi nadie parece acordarse.