M. Hernández Sánchez-Barba

Sancho de Matienzo

El encuadramiento epocal de Sancho de Matienzo ocurre en la época de los Reyes Católicos. Una época brillante, de enorme riesgo, fuertes contingencias políticas y sociales, importantes empresas comunitarias, considerables resultados, aunque sin duda de enorme dureza. Isabel I de Castilla será reina a la muerte de Enrique IV en 1474; Fernando, rey de Aragón en 1479 a la muerte de su padre, Juan II. Casados en 1469, en su matrimonio las dos ramas de la dinastía Trastámara se unen sacramentalmente dando un paso gigantesco para la unidad de España y para el asentamiento del Estado moderno, que queda constituido en las Cortes de Madrigal (1476) y de Toledo (1480).

Burgos fue fundado por el segundo conde de Castilla, Diego Rodríguez Porcelos (884). García Fernández, hijo del conde Fernán González, mostró predilección por Burgos, que a principios del siglo XI alcanzó la condición de capital del condado de Castilla. Cuando Alfonso VI heredó el reino de Castilla promovió la importancia de Burgos, pero fue Alfonso VIII quien afianzó la capitalidad del reino, mejoró los fueros, creó con gran generosidad Las Huelgas, extendió el Alfoz de Burgos y desarrolló Burgos como foco estratégico del comercio de la lana y el hierro de la Meseta, los Valles y los puntos del Cantábrico. Un comerciante del valle de Carranza, Sancho Ortiz de Matienzo, se estableció con su familia en Villasana de Mena, ruta principal comercial entre Burgos y Bilbao. Burgos fue la ciudad más rica de Castilla en la primera mitad del siglo XVI; decae en la segunda mitad debido al auge de Sevilla, principal asentamiento del punto central de la política y el comercio con América y asentamiento, desde 1503, de la primera institución americanista, la Casa de Contratación.

En esa época y ambiente se desarrolla la biografía de Sancho de Matienzo en armonía perfecta con la situación que a grandes rasgos ha quedado perfilada. Murió el 8 de diciembre de 1521, aunque se ignora dónde está su sepultura. Conocemos que cuando fue nombrado tesorero de la Casa de Contratación de Sevilla tenía treinta y cinco años, de manera que nació en 1468, en Villasana de Mena, donde su padre instaló su casa comercial. Decide abrazar la carrera eclesiástica; estudió en Valladolid, donde existía un Estudio General desde el tiempo del conde Pedro Ansúrez, transformado en Universidad Real y Pontificia por Alfonso X «el Sabio». Debió llegar a Valladolid hacia 1485, contando quince o dieciséis años, cuando ya era universidad especializada en Derecho Canónico, Romano y otras especialidades. Concluidos sus estudios, se deja llevar por la emigración hacia el valle del Guadalquivir, llegando a Sevilla en 1489, cuando la construcción de la catedral sobre las ruinas de la mezquita ocupaba atención y necesidades de los sevillanos. En 1401 el Cabildo decide elevar el templo catedral y el rey Enrique III (1309-1406), aprobó el acuerdo, y la construcción comenzó en 1408.

Sancho de Matienzo llegó a Sevilla como Beneficiado y pronto destacó por sus dotes de buen administrador y fiel cumplidor de sus obligaciones; en 1487 alcanzó el puesto de Provisor, director de obras, Canónigo doctoral. Fue promotor del Estudio General junto con Maese Rodrigo de Santaella y formó parte del grupo de don Juan Rodríguez de Fonseca, con amistad fuerte del Deán de la Catedral, hasta 1497 en que Fonseca fue nombrado obispo de Badajoz, cuando ya se ha iniciado la línea principal del Descubrimiento del Nuevo Mundo. En 1479 se firmó el tratado de Alcaçovas, en que además de las paces con Portugal, tiene lugar la división de la navegación del Océano entre portugueses y castellanos.

Sancho de Matienzo no olvidó su pueblo natal; construyó un palacio en la plaza principal del pueblo y una capilla adosada a una residencia de monjas de clausura, primero clarisas e inmediatamente de la Purísima Concepción. En la Parroquia de Villasana figura una lápida votiva del año 1498, que representa la Giralda almohade, con una inscripción latina que da la fecha de terminación de la capilla y dice: «Ésta es la Torre de la Iglesia de Sevilla donde es canónigo el Doctor Sancho de Matienzo que hizo esta capilla. Acabóse año del Señor de mil cuatrocientos noventa y nueve». Otra inscripción funeraria demuestra que ordenó llevar a enterrar en ella a su padre y a su hermano Juan. En 1503 fue nombrado Tesorero de la Casa de Contratación de Sevilla, cargo que ejerció hasta su muerte en 1521 con plena honradez como ha demostrado el historiador, catedrático y académico Miguel Ángel Ladero Quesada, que ha publicado las cuentas de Matienzo como tesorero tal como figuran en el legajo 240 de la Contaduría Mayor de Cuentas del Archivo de Simancas. Por último, fue nombrado primer cargo eclesiástico de América como Abad de Jamaica.