El taxi puede perder a la opinión pública

Los taxistas mantendrán la huelga indefinida al considerar insuficiente la propuesta ofrecida por el Ministerio de Fomento: aprobar en el Consejo de Ministros del próximo 14 de septiembre un decreto ley para que se cumpla la proporción de una licencia de VTC –Uber y Cabify– por cada treinta taxis. Aunque ésta es la reivindicación central de todas las asociaciones, la siguen considerando «insuficiente». Dudan de que la actual configuración del Congreso permita su aprobación y exigen que las comunidades asuman las competencias. El objetivo del sector del taxi no es otro que frenar a Cabify y que pierda su posición, sin posibilidad de convivir con el mundo del taxi. Así parece por las declaraciones de sus dirigentes, demasiado radicalizados –de innegable sesgo populista– y muy incitados por el éxito de la movilización en toda España. Es necesario un marco legal en el que tengan cabida los VTC, lo que obligará a dialogar. Sobra, por lo tanto, hacer llamamientos a crear «alarma social» o a bloquear fronteras y puertos para impedir la circulación de mercancías. El sector del taxi puede perder la batalla de la opinión pública sin persisten en una protesta que está siendo abusiva, bloqueando en centro de Barcelona y Madrid con puntos de violencia inadmisibles.