Relaciones laborales

Viernes sociales sin urgencia

El Gobierno ha sacado a pasear la cantinela de la urgente necesidad para justificar la exorbitante productividad de decretos ley con el Parlamento disuelto. Pero resulta que incluso el concepto de urgencia es relativo para el Ejecutivo, de tal modo que, por ejemplo, ha vuelto a retrasar la ampliación del permiso por paternidad y lo ha aplazado al 1 de abril. En los viernes sociales no hay virtud ni derecho. Sólo un ánimo electoralista amparado en el desahogo moral y político de quien entiende que el fin justifica los medios.