El buen salvaje

El Rey y yo

He aquí un rendido admirador de su literatura. Tan contenida como brava. Iluminado y sensato. El barroquismo exacto

Cuando el Rey comenzó su discurso ya mi madre había comenzado a comer, pelaba los langostinos lentamente y de vez en cuando subía la mirada para ver a ese hombre «que entra por los ojos» de lo guapo y lo alto que es. Antes de esa cena, que nos empeñamos en hacer de porcelana y cristal fino, cuando no se sabe de dónde saca España para tanto como destaca, el Rey habló como si rapeara, Bad Bunny con zapatos con hebilla, igual que un día hizo la Reina, y nos leyó un poema de antología, un poema de amor a España y los españoles. Unos sonetos del amor oscuro políticos. «El aire es inmortal. La piedra inerte, ni conoce la sombra ni la evita, Corazón interior no necesita, la miel helada que la luna vierte». Que de no estar el ambiente como está, yacerían guardados, prohibidos. Luego han llegado unos comentaristas de textos a sacar conclusiones ridículas. Pobres. Es muy triste tener que explicar un poema en mala prosa, en español moderno en cuanto a cutre.

El Rey soltó frases fuertes, puedo escribir los versos más tristes está noche, pero los adornó de esperanza e incluso de advertencia. Jamás un Rey en el tiempo en que llevo más o menos vivo me había dedicado un poema entre el jaleo de una casa, donde es un drama que no aparezcan las copas de flauta de cava.

Tenía alguna idea pero comprendí para qué sirve un Rey. Ese ejercicio que preguntan a los escolares. Un Rey, a diferencia de un político, escribe a los ciudadanos tanto las frases que está esperando y las que no quiere oír. Quise escucharlas todas. Anda el Gobierno con sus redacciones de colegiales, pobre sintaxis, tormentosa gramática, mortal sintagma, y llega el Rey y le toca el muslo a una musa o a un muso para dejar de estar en las musarañas. Para lo que Su Majestad pida, he aquí un rendido admirador de su literatura. Tan contenida como brava. Iluminado y sensato. El barroquismo exacto. La fluidez cantada entre otros programas donde lo que hay es una historia de play back.