Un PP desatado que parodia el final del 'sanchismo'

Lágrimas en Ferraz. Lágrimas en Ifema. No podía contener el llanto la ministra Isabel Rodríguez mientras hablaba Pedro Sánchez en el comité federal del PSOE más amargo que se recuerda en mucho tiempo. Le pasaba lo mismo a Dolors Montserrat, que lloraba de la risa mientras hablaba Abrahán Gómez González, un humorista canario que se ha colado en el XXI Congreso Nacional del PP porque los del "pis", ejem, los del "CIS", le han encomendado hacer "una encuesta" para luchar "por el relato" a cambio de "una mordida".

Humor en aguas populares como contrapunto del drama que atraviesan los socialistas. A las once, se reanudó el cónclave que culminará este domingo con la elección de Alberto Núñez Feijóo para un segundo mandato al frente de la formación. La parroquia pepera desatada en el ceremonial que proclama la llegada de su líder a la Moncloa. La socialista, compungida por la crónica de un funeral anunciado.

Por primera vez en la historia de la formación conservadora, la segunda jornada del cónclave arrancó con un acuerdo total para aprobar las ponencias en liza. Nada de debate. Lo avanzó ayer LA RAZÓN y lo destacó el presidente del Congreso, Xavier García Albiol. Los dos textos se votaron "de manera unánime, sin ningún voto en contra y sin ninguna abstención". Un hito.

A esa hora, el PSOE comunicaba que Francisco Salazar, que iba a ser número dos de Organización, la cartera que ocupaba el encarcelado Santos Cerdán por encabezar presuntamente una organización criminal, da un paso atrás por un posible caso de acoso sexual. Minutos más tarde, la Moncloa hacía lo propio: el socialista deja sus responsabilidades en el Gobierno. Más estopa en la hoguera de los escándalos.

La mayoría de dirigentes populares estuvieron más pendientes de sus pantallas, donde echaban un ojo a lo que sucedía en Ferraz, que de los discursos de su congreso. Intervinieron los encargados de redactar las dos ponencias. Entre ellos, Juanma Moreno, presidente andaluz, que echó unos cuantos puñados de sal a la herida por la que se desangra el PSOE. Dijo que hay "un problema con la relación" entre los cuadros socialistas "y las mujeres".

El presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, habló de un "fallo multiorgánico de Sánchez" frente a un PP que es "garantía de estabilidad, de eficacia y de calidad". Mientras que en Ferraz "están ahogados en sus escándalos y sujetos por alfileres", el PP de Feijóo, presumió, "piensa en los españoles y en construir un progreso económico y social".