Juicio del "procés"

Preocupación de las fuerzas de seguridad por el posible boicot de los independentistas al clásico Barça-Madrid

Barajan escenarios que van desde una protesta en la grada hasta interrumpir el partido o bloquear a los equipos a la entrada

Los independentistas usarán la plataforma que les da el clásico Madrid-Barça
Los independentistas usarán la plataforma que les da el clásico Madrid-Barçalarazon

Los responsables del dispositivo policial en Cataluña han empezado a valorar en las últimas horas con preocupación creciente la posibilidad de que la violencia protagonizada por grupos independentistas se mantenga esta semana

Los responsables del dispositivo policial en Cataluña han empezado a valorar en las últimas horas con preocupación creciente la posibilidad de que la violencia protagonizada por grupos independentistas se mantenga esta semana en torno a la huelga general convocada para el viernes y que, la próxima semana, desemboque en torno al partido de fútbol entre FC Barcelona y Real Madrid, han informado a Europa Press fuentes policiales. Según las fuentes, entre los escenarios que se barajan se contempla que se limiten a mostrar su rechazo a la sentencia desde las gradas del Camp Nou, algo que ya ha ocurrido en otras ocasiones, por ejemplo en finales de la Copa del Rey con pitada al himno y al Rey.

También se contempla que el grado de la protesta se eleve si se plantea desde la organización de las protestas y se lleva a cabo una acción que pase por interrumpir el partido una vez iniciado o en los prolegómenos, por ejemplo tratando de bloquear con la presencia de cientos de personas la llegada al estadio blaugrana de los autobuses de ambos equipos.

El clásico

El 'clásico' entre Barça y Madrid está previsto que se juegue el sábado 26 de octubre a las 13.00 horas, doce días después de hacerse pública la sentencia a los líderes del 'procés' indepedentista por delitos de sedición y malversación. Tras conocerse el fallo se iniciaron las protestas anunciadas por Tsunami Democràtic y que se centraron en la primera jornada, principalmente, en los alrededores del aeropuerto de El Prat. Preocupa que Tsunami Democràtic haya lanzado un comunicado, luego matizado, para llevar las protestas al 26 de octubre, el día del 'clásico', pidiendo además responsabilidades políticas por las cargas de Mossos d'Esquadra y Policía Nacional, que califican de "brutalidad policial". Oficialmente, están convocadas las llamadas 'Marchas de la Libertad' y una huelga para este viernes. Diferentes plataformas sindicales --entre ellas UGT y CCOO-- anunciaron esta semana que celebrarían una manifestación el mismo sábado que se juega el Barça-Madrid.

Este miércoles LaLiga ha abierto la posibilidad de que no se juegue el partido el 26 de octubre en el Camp Nou al solicitar al Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) que se disputara en el Santiago Bernabéu, el estadio del Real Madrid. El 1 de octubre de 2017, el FC Barcelona jugó a puerta cerrada su partido de Liga contra Las Palmas como protesta por las cargas policiales para impedir el referéndum en cumplimiento del mandato judicial. Desde la Policía Nacional -y también la Guardia Civil, que aún no ha tenido que emplearse en tareas de 'antidisturbios' en Cataluña, aunque sí han estado prevenidos en varios escenarios, entre ellos El Prat- se conjuran para no caer en provocaciones y mantener el orden público. El mensaje más repetido desde el Ministerio del Interior es que la colaboración policial con los Mossos es óptima y que "se garantizará la seguridad ciudadana". El director adjunto operativo (DAO) de la Policía, José Ángel González, se ha reunido este miércoles en la Jefatura Superior con los sindicatos, subrayando que existe "colaboración sin fisuras"con los Mossos, que el trabajo policial será recompensado y que no hay fecha para poner fin al dispositivo de refuerzo. Desde Interior se ha confirmado poco después que este fin de semana se enviarán más policías a Cataluña para cubrir relevos.

La clave

Con todo, desde la Policía Nacional entienden que "por ahora todo más o menos está dentro de lo esperado", aunque no esconden su preocupación por la evolución de los altercados durante esta semana, que prevén muy complicada. "La clave es si mantienen o no este grado de tensión", señala un mando policial a preguntas de Europa Press, que este miércoles consideraba que aún era pronto para valorar si conviene aplazar o trasladar de ciudad el Barça-Madrid. Las citadas fuentes ven un "riesgo creciente"en que los grupos que actúan de la mano de Tsunami Democràtic traten de visibilizar su protesta en torno a un partido como el Barça-Madrid, calificado siempre de alto riesgo y que garantiza audiencias planetarias, sobre todo si se plantea como desafío a los policías y con un cariz violento.