Francisco, nuevo Papa

A la espera

La Razón
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Es impresionante que la Iglesia entera viva en oración estas jornadas, en plena sintonía de comunión eclesial, a la espera de conocer quién es el elegido para Pastor de la Iglesia universal. Todos estamos a la espera del nuevo Papa que Dios da a su Iglesia. A simple vista, parece que se trata de algo que hacen los hombres, combinando sus cábalas, la suma de sus votos, el perfil que nos hayan presentado los medios. Sin embargo, asistimos en la elección del Sumo Pontífice a una acción directa del Espíritu Santo, alma de la Iglesia, protagonista de este acontecimiento, que actúa a través de los Padres Cardenales. Cada uno depositará su voto mirando a Dios y al bien de la Iglesia y de la humanidad. Y aquí nuestra oración, para que con rectitud de intención y sin otro interés, elijan al que en conciencia debe regir la Iglesia en los próximos años.

Se trata de un acontecimiento histórico. Primero porque sucede de tarde en tarde, pero sobre todo, porque sucede con unas repercusiones enormes en la marcha de la historia de la Iglesia y de la humanidad entera. Pablo VI fue el primer Papa que viajó por el mundo y habló ante la ONU, Juan Pablo II ha contribuido como el que más a la caída del muro del Berlín, inaugurando una nueva época en las relaciones internacionales, y ha hecho presente el Evangelio para millones de personas en todo el mundo, Benedicto XVI ha descrito la dictadura del relativismo, que asfixia al hombre y le impide acceder a la verdad, y ha trabajado por la santidad de la Iglesia y de sus sacerdotes. ¿Cuál será la aportación del nuevo Papa? Sin duda, será un bienhechor de la humanidad, además de ser el Pastor de todos los fieles cristianos. La Iglesia está viva. La elección del Papa es una señal inequívoca de seriedad, de buen hacer, de solemnidad, de rectitud en la búsqueda del bien. Es algo que interesa a toda la humanidad, es algo que influirá en la paz del mundo y en la justicia. Por eso, rezamos estos días e invitamos a rezar a todo el que sepa hacerlo. Es por el bien de todos.