¿Existe Dios? Una iniciativa juvenil ofrece algunas respuestas y otras preguntas

Todos, alguna vez en la vida, nos hacemos las mismas preguntas: ¿Existe Dios?, ¿Se puede probar científicamente su existencia?, ¿Cómo es Dios?, ¿Por qué existe el sufrimiento?... Lo complicado es encontrar la respuestas o una respuesta con la claridad que desearíamos. Ahora, de la mano de la Fundación Carmen de Noriega, una entidad que se dedica a la difusión del Evangelio a través de la comunicación, podremos aclararlas a través de la campaña Atrévete a buscar, aunque con ella se nos plantearán otras muchas preguntas.

Por el momento, ha publicado tres vídeos, que se pueden ver en You Tube y en la página de Atrévete a buscar, que buscan generar diálogo en torno a la existencia de Dios y a cuestiones que afectan al sentido de la vida, seamos creyentes o no, explica Gonzalo Barriga, uno de los promotores.

Los audiovisuales -realizados con la técnica del visual thinking y que contaron con la colaboración en el guión del profesor de Antropología Teológica de la Universidad Pontificica Comillas, Pedro Castelao- abordan, además de la existencia divina, el porqué del mal en el mundo o se embarca en la aventura de describir al Dios. “Estamos convencidos de que quien busca encuentra respuestas en su vida. Quizá no en el momento que a él le gustaría, o de una forma absolutamente completa, pero encuentra. Por eso esta campaña anima a buscar”, añade Barriga.

¿Existe Dios? Todos nos hemos hecho alguna vez esa pregunta. Y quizás no todos tengamos la respuesta clara. Es probable que en ocasiones dudemos. Si eres de los que se hacen preguntas y quieres seguir investigando sobre la existencia de Dios con algunas respuestas (y muchas otras preguntas).

¿Por qué sufrimos? Si existe Dios y dicen que es bueno y todopoderoso... ¿por qué no impide el mal en el mundo?, ¿por qué sufrimos? Nos encontramos ante el problema del mal, nunca completamente resuelto.

¿Cómo es Dios? ¿Es un tirano? ¿Es bondadoso? ¿Es un juez castigador? ¿Cómo es realmente Dios? Quizá nos hemos alejado de Él porque nos hemos hecho una imagen falsa o deformada.