Roma

Ricardo Blázquez: «Seré un colaborador especial de Francisco para lo que me pida»

Ricardo Blázquez: «Seré un colaborador especial de Francisco para lo que me pida»
Ricardo Blázquez: «Seré un colaborador especial de Francisco para lo que me pida»larazon

Con gesto sereno comparecía ante los medios el arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, un día después de que el Papa Francico le nombrara cardenal.

Con gesto sereno comparecía ante los medios el arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, un día después de que el Papa Francico le nombrara cardenal. «Es un estímulo y estoy dispuesto a colaborar hondamente y con sacrificio en las demandas que requiera el Papa», indicaba de manera sosegada, tras reconocer que un «haz de sentimientos» se fueron acumulando en su interior al conocer tal designación.

Por un lado, «sorpresa», al confesar que «no sabía nada». Por otro, «gratitud», por el signo de confianza y el voto en blanco que se le otorga de cara al futuro. Y un último de «alegría y satisfacción», por lo que supone un recorrido a su dilatada vida sacerdotal y al reconocimiento en el trabajo que ha venido realizando.

El actual arzobispo de Valladolid desde el 13 de marzo de 2010, cargo que compagina con la presidencia de la Conferencia Episcopal, podrá participar, a partir de ahora, en la elección de un nuevo Papa, cuando así se requiera, tendrá voz en los Consistorios que se celebren, además de consultar personalmente al Papa en cuestiones que Francisco demande. «Seré un colaborador especial del Papa para lo que nos vaya pidiendo».

Preguntado por cuáles habían podido ser las razones por las que Francisco ha apostado por su figura, Monseñor Blázquez se remontaba a un encuentro mantenido el mes de febrero del pasado año en la visita «Ad Limina» en Roma, donde el Papa le preguntaba sobre cómo distribuía el tiempo para poder también escribir.

Recalcó, igualmente, su alegría por la «Diócesis de Valladolid», ya que hasta su nombramiento la ciudad sólo ha contado con tres cardenales, Juan Ignacio Moreno y Maisanove, nombrado en 1868 por Pío IX; Antonio María Cascajares, designado por León XIII en 1895, y el último en 1911, José María de Cos Macho.

Ricardo Blázquez también se refirió a la figura de Francisco en estos dos años de Papado que lleva. «La esperanza suscitada va más allá de los límites de la Iglesia católica y la humanidad le contempla como la mejor ayuda en el camino para mantener la esperanza y dar aliento a los más desfavorecidos».

Y añade además, que la Iglesia española «ha sintonizado» con las directrices del Papa, identificándose con su hacer y con las manifestaciones que, día a día, va mostrando. Un nombramiento que puede suponer también la tan ansiada visita del Papa a España, concretamente a Ávila y Alba de Tormes, lugares de la cuna y la muerte de Santa Teresa de Jesús, que, aunque todavía no está anunciada oficialmente, monseñor Blázquez confía en que así será, pero avisa de que será de manera «breve», como ha venido realizando en los viajes que ha llevado a cabo hasta la fecha.