Entrevista

«La Administración sigue sin dotar a la Sanidad de los medios que prometió»

El déficit de enfermeras actual se va a agravar en los próximos años «cuando se jubilen cerca de 5.000 en la Comunidad de Madrid», incide Jorge Andrada, presidente del Colegio de Enfermería de Madrid

Jorge Andrada, presidente del Colegio de Enfermería de Madrid
Jorge Andrada, presidente del Colegio de Enfermería de MadridLa RazónLa Razón

Su candidatura «Más Profesión» obtuvo el respaldo mayoritario de las enfermeras y enfermeros en Madrid para tratar de luchar contra el déficit crónico de estos profesionales, la alta precariedad que sufren y el desarrollo de especialidades.

Hace dos domingos miles de enfermeros salieron a la calle convocadas por Unidad Enfermera. ¿Cuáles eran los motivos?

Hace tiempo que, desde el Colegio Oficial de Enfermería de Madrid (Codem), reclamamos una Sanidad que responda a las necesidades de cuidados de todos, y esto no es posible si no se mejoran las pésimas condiciones de las enfermeras, tanto de las que trabajan en la Sanidad pública, como de las más de 15.000 de la Sanidad privada, o en otros ámbitos como el sociosanitario. La atención que presta el sistema sanitario ha empeorado tras la pandemia. El motivo, que la Administración no está cumpliendo los compromisos adquiridos en 2020 de destinar todos los medios y recursos necesarios para salvaguardar la Sanidad. Es necesario garantizar la seguridad asistencial de los pacientes y contar con la dotación adecuada de enfermeras en todos los servicios de salud.

¿Se refiere entonces a que faltan enfermeras en Madrid?

Sí, y de hecho venimos reclamando un aumento necesario de enfermeras desde antes de la pandemia, donde ya contamos con un déficit de 14.000 enfermeras, lo que hace imposible cuidar con total seguridad al paciente, al no poder garantizar la demanda de cuidados y la necesaria continuidad asistencial. Además, este déficit se va a agravar en los próximos años, cuando se jubilen cerca de 5.000 enfermeras en la Comunidad de Madrid, sin haber asegurado un relevo generacional. A lo que le sumamos la necesidad creciente de cuidados de una población más envejecida, con pluripatologías y mayor nivel de dependencia. Tenemos que añadir también que la aprobación del «Procedimiento de actuación ante la ausencia de médico de familia en un centro de Salud», así como el anuncio de la no reapertura de todos los SUAPs cerrados en la pandemia, no va a ayudar a reducir la alta carga asistencial que ya sufrimos. E insistimos en que el incremento de la actividad de las enfermeras en atención primaria se debe acompañar de mejoras en las condiciones y de las herramientas necesarias para poder realizar su trabajo con garantías.

¿Qué modelo proponen?

Atención primaria es un nivel asistencial donde las enfermeras desempeñan un papel clave. Proponemos un modelo de atención primaria con mayor protagonismo enfermero, que apueste por los cuidados y la prevención. En este modelo, la enfermera es quien gestiona todo el proceso de cuidados, pero para ello debe contar con las herramientas necesarias. Esto nos permitirá proporcionar a los ciudadanos, tanto en los centros de salud como en los domicilios, los cuidados que requieren. Esto no será posible sin el pleno reconocimiento profesional de las enfermeras. Exigimos que se reconozca la capacidad de gestión y liderazgo de la profesión, y aquí, es fundamental la reclasificación profesional y que se nos incluya en el Grupo A, sin subgrupos, algo necesario que debe acompañarse también de medidas que pongan fin a la precariedad y la temporalidad.

¿La profesión cuenta con el reconocimiento que merece?

La profesión enfermera necesita mayor visibilidad y reconocimiento, tanto por parte de la sociedad como de las administraciones y empresas sanitarias. Creemos que el reconocimiento de las personas a las que atendemos lo tenemos, pero falta el de la Administración para que se traduzca en las mejoras que demandamos. Estamos mucho más capacitados para atender los actuales problemas de salud y tenemos una gran preparación y formación. Sin embargo, sentimos que estamos más valorados en otros países. Desde el Codem trabajamos para que la sociedad y el resto del ámbito sanitario reconozcan y otorguen el verdadero valor que tiene nuestra profesión como garantía de los derechos de los pacientes a su salud.

¿Qué herramientas tiene a su alcance el Colegio para conseguir que las enfermeras alcancen todas las reivindicaciones?

Entre otras competencias, somos un interlocutor necesario del Gobierno regional. A través de esa labor de representación estamos convencidos de conseguir nuestras metas. Este Colegio lo componen más de 46.000 enfermeras madrileñas y la Administración no puede infravalorar su imprescindible papel en la sociedad y la sanidad madrileña. Como se pudo escuchar en la manifestación del pasado 18 de junio, «sin enfermeras no hay Sanidad».

¿Qué valoración hace de los resultados obtenidos por Más Profesión, su candidatura?

Las enfermeras y enfermeros de Madrid depositaron su confianza de manera mayoritaria en Más Profesión, que prácticamente dobló en votos a la otra candidatura concurrente. Son unos resultados extraordinarios de los que podemos extraer varias conclusiones: además de la alta participación, las enfermeras de Madrid aprueban la gestión y el rumbo que el Colegio ha tomado y, por otro lado, han confiado en un equipo renovado y con experiencia en diferentes ámbitos, centrado en lo profesional, dejando al margen cualquier filiación política y con un único objetivo: trabajar por los colegiados.

¿Entiende las quejas de algunos colegiados por algunos de los retrasos que hubo?

Todo el proceso electoral se llevó a cabo como marcan nuestros Estatutos. Además, y por decisión de la mesa electoral, hubo posibilidad de votar también fuera del horario marcado en la jornada de votación, para todos los que se encontraban a las puertas del colegio. Entendemos que cualquier demora pudo molestar a algunos colegiados. Y por eso, y cumpliendo escrupulosamente los Estatutos, se habilitó el voto por correo, derecho que ejercitó una gran mayoría de los votantes que evitaron así tener que desplazarse a la sede colegial.