Coronavirus

China tuvo una epidemia secreta antes del coronavirus que ha matado a 440 millones de cerdos

El primer caso fue descubierto el 1 de agosto de 2018 en una granja cerca de Shenyang, en el norte, pero las autoridades silencian cualquier referencia

Una granja de cerdos en China, en una imagen de archivo
Una granja de cerdos en China, en una imagen de archivolarazon

Hace más de un año y medio China ya tuvo que enfrentarse a otra epidemia, igual de destructiva que la causada por el contagio del coronavirus. Y es que el silencio administrativo y oficial alrededor de la peste porcina africana (PPA) guarda respeluznantes coincidencias con la gestión de las autoridades chinas ante el CORONAVID-19. Según una investigación de Reuters, la rápida propagación de esta epidemia que aún continúa ha sido posible gracias a la “subnotificación sistémica de brotes" en el país.

Todo comenzó igual que en el caso de la enfermedad que nos ocupa. Se descubrió el virus en China y las autoridades aconsejó a los que lo sabían que se callaran, y, además y en contra del protocolo establecido, los funcionarios no quisieron hacer pruebas para confirmar estos brotes y no se hizo un aviso público y notorio de información sobre el patógeno y causó millones de muertes de cerdos por todo el país. Incluso aún ahora el secretismo que rodea esta epidemia está dificultando con creces la posible solución a una de las peores epidemias de ganado de su historia moderna.

Las similitudes con el caso de Wuhan son muy claras. Al principio las informaciones o no llegaban, o lo hacían con cuentagotas y los funcionarios de la provincia de Hubei, centro del foco de coronavirus, tardaron demasiado tiempo en dar la voz de alarma y comenzar a tomar medidas para evitar el contagio. Sobre el coronavirus, como de la fiebre porcina, se penalizan las noticias negativas y cualquier publicación por redes sociales sobre el tema o sobre la gestión del gobierno, es criticada y censurada.

Según la industria de la carne, se estima que la peste africana ha reducido los 440 millones de cerdos heredados de China a la mitad, eliminando del mercado un 25% de los cerdos de todo el planeta. También es el causante del aumento del precio de la carne y ha provocado una inflación de los alimentos a ocho años. Cualquier medida que se tome ahora ya es tardía, ahora que se extendido por 10 países de Asia y existe un vacío informativo que afecta a todos los sectores implicados: ganaderos, agricultores, veterinarios e industriales de la carne. Su propagación es tal que los expertos, puestos manos a la obra, no sabrían por donde empezar.

El Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales de China dijo en un comunicado a Reutersque ha informado en repetidas ocasiones a todas las regiones la importancia de transmitir oportunamente y con precisión sobre los brotes de peste porcina africana y que tiene cero tolerancia para ocultar y retrasar la notificación de casos. Ahora la PPA ya ha registrado un caso en Polonia, a solo 12 kilómetros de la frontera con el mayor productor de carne de cerdo de Europa, Alemania. “Un caso confirmado en Alemania podría dar lugar a una prohibición de las importaciones, lo que pondría fin al auge de los criadores de cerdos locales, que han experimentado un repunte de las exportaciones a China, el mayor consumidor mundial de carne de cerdo, debido a los brotes de PPA en Asia”, explica la agencia.

Más de una docena de agricultores chinos dijeron a Reuters que informaron brotes de enfermedades a las autoridades locales que nunca llegaron a las estadísticas oficiales de Beijing. Esas infecciones no se informan a las autoridades centrales en parte porque los condados carecen del efectivo para cumplir con un requisito separado de Beijing para compensar a los granjeros por los cerdos muertos para controlar la enfermedad. Beijing tuvo años para prepararse para la peste porcina africana. Los veterinarios han advertido con frecuencia a las autoridades chinas sobre los riesgos desde que la enfermedad comenzó a extenderse por la región del Cáucaso en 2007.

¿Cómo afecta la PPA a los animales?

El primer caso fue descubierto el 1 de agosto de 2018 en una granja cerca de Shenyang, en el norte. Los cerdos infectados por el virus sufren inicialmente fiebre alta, pérdida de apetito y diarrea. Luego, su piel se vuelve roja cuando comienza la hemorragia interna y sus órganos se hinchan, lo que lleva a la muerte en tan solo una semana. Sin una vacuna o cura disponible para la enfermedad, los expertos recomiendan que los cerdos infectados y otros alojados en el mismo establo sean sacrificados, con los cadáveres quemados o enterrados para evitar una mayor infección. Las granjas, equipos y vehículos que podrían estar contaminados deben limpiarse y desinfectarse a fondo.