¿Qué debo hacer si me toca la lotería de Navidad?

Si a usted le toca la Lotería, lo primero que debe hacer es celebrarlo, por supuesto, y más en este año de pandemia de Covid-19 que ha trastocado por completo la vida tal y como la conocíamos, y ha provocado la muerte de tantas personas y seres queridos. Después, pensar en qué lo va a gastar, aunque antes deberá tener consideración algunos aspectos.

Cada uno de los agraciados con uno de estos décimos recibirá 400.000 euros por cada uno. Pero no todo ese dinero se ingresará en las cuentas corrientes de lospremiados. Hacienda se quedará con un buen pellizco. Los que tengan en sus manos un décimo del Gordo deberán abonar a las cuentas públicas 72.000 euros; los que ganen los 125.000 euros del segundo premio entregarán 17.000 euros al Estado; y a los ganadores de los 50.000 euros del tercer premio se les descontarán 2.000 euros. Y, a partir de ahí, nada más. Los dos cuartos premios, de 20.000 euros cada uno se salvan y no tendrán retención, al igual que todos y cada uno de los premios menores.

Los agraciados deben saber que no tendrán que hacer ninguna gestión administrativa ni fiscal extra, ya que la Agencia Tributaria realizará directamente la retención en el momento del cobro del premio. De este modo, los afortunados recibirán el importe de su «regalo» con el impuesto ya descontado. Tampoco deben preocuparse del impacto que estos premios puedan tener en su declaración de la renta, ya que únicamente tendrán que añadir en su declaración los posibles rendimientos que el dinero conseguido les pudiera generar, como los intereses bancarios.

Pero, cuidado, sí debe incluirse de cara al siguiente ejercicio fiscal cualquier operación que implique un aumento del patrimonio personal, que se tendrá que reflejar en el Impuesto sobre Patrimonio de ese ejercicio.

¿Dónde cobrarlo?

Los premios podrán cobrarse de forma inmediata, pero se dispone de un plazo máximo de tres meses para hacerlo efectivo. Los décimos premiados con una cantidad inferior a 2.000 euros se podrán cobrar desde el día siguiente al sorteo en los distintos puntos de venta de la red comercial de Loterías y Apuestas del Estado. Los premios iguales o superiores a 2.000 euros podrán ingresarse o cobrarse en alguna de las entidades financieras.El cobro de participaciones tiene un proceso diferente. Estos boletos, que son una parte de un décimo, no se pueden cobrar en una administración de loterías ni en las entidades bancarias porque no se trata de boletos oficiales. En este caso, el emisor de las participaciones debe responsabilizarse de completar los pagos, ya que él es el poseedor de los décimos. Cualquier gravamen correspondiente a Hacienda deberá hacerse sobre la totalidad del premio.

El sorteo Extraordinario de Lotería de Navidad del año pasado fue el último en el que los agraciados tuvieron que tributar sus premios por encima de 20.000 euros. El mínimo exento ha aumentado hasta los 40.000 euros en todos los sorteos del año 2020.

Pero, qué pasa si el décimo es compartido? Para evitar disgustos, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) aconseja si se va a cobrar un premio compartido identificar en el banco a cada ganador y su porcentaje de participación. La organización señala además que los bancos pueden abonar el premio entero en la cuenta de la persona que ya es titular de una cuenta en esa entidad y que después repartirá según lo convenido.Asimismo, la OCU recomienda no cobrar el premio solo una persona sin identificar a los otros participantes, ya que al repartirlo puede parecer que está donando el dinero, lo que obligaría al pago del impuesto de donaciones.

Un décimo es un documento al portador, es decir, que el premio lo recibe quien lo tiene en su poder. Por este motivo, si se comparte el boleto la OCU recomienda que el depositario del mismo lo fotocopie y entregue a cada participante una copia firmada (con el nombre y DNI del depositario) en la que se indique que la persona juega en ese número, serie, fracción y sorteo, una cantidad de euros determinada.

Vale una fotografía enviada por correo electrónico o WhatsApp. Según la OCU, esto puede ser una prueba, «siempre y cuando» aparezcan los datos del depositario, los participantes y la participación de cada uno. «Si la otra parte impugna esa prueba por considerar que se ha manipulado, habría que demostrarlo». Es importante también hacer una fotografía y fotocopia del décimo por si llega a perderse o lo roban, para poder denunciar ante la Policía.