Vuelve la fiesta

El Corpus Christi vuelve a las calles de Toledo

La Custodia de Arfe procesiona por el casco histórico en una mini procesión por las restricciones de la pandemia

La Custodia de Arfe (i, al fondo), sale a la calle por la Puerta Llana de la Catedral Primada para ser expuesta con motivo de la celebración del Día del Corpus Christi este jueves en Toledo. Toledo se engalana con flores, reposteros, adornos y mantones para vivir, aún en pandemia, su fiesta principal, el Corpus Christi, y poder ver de nuevo la Custodia de Arfe, que tampoco desfilará este año aunque sí saldrá hasta la Puerta de Reyes de la Catedral.
La Custodia de Arfe (i, al fondo), sale a la calle por la Puerta Llana de la Catedral Primada para ser expuesta con motivo de la celebración del Día del Corpus Christi este jueves en Toledo. Toledo se engalana con flores, reposteros, adornos y mantones para vivir, aún en pandemia, su fiesta principal, el Corpus Christi, y poder ver de nuevo la Custodia de Arfe, que tampoco desfilará este año aunque sí saldrá hasta la Puerta de Reyes de la Catedral.Ismael HerreroEFE

El Corpus Christi vuelve a las calles de nuestro país después del año en blanco del confinamiento. Pero lo hace con timidez, sin el despliegue previo a la pandemia debido a que se mantienen las restricciones de actos en la vía publica dado que todavía no se ha logrado la inmunidad de rebaño.

Toledo, epicentro de las celebraciones, ha vuelto a vestirse de fiesta y la Custodia de Arfe ha vuelto a procesionar por el casco histórico. Eso sí, en edición ‘gourmet’. Ha salido por la Puerta Llana de la Catedral para enfilar la calle Cardenal Cisneros, llegar a la Plaza del Ayuntamiento y detenerse en la Puerta de los Reyes para ser adorada.

Insuficiente para algunos, pero esperanzador para otros. Como para el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, que no ha dudado en compartir su emoción con los presentes por poder “ver a Dios en la calle, a Jesús que sale al encuentro de la Humanidad”. El pastor ha valorado este paso al frente para recuperar este acto vinculado a la historia de nuestro país, a la tradición y a la piedad popular en un momento en el que “toda una Humanidad que necesita redescubrir que no somos como dios y que tenemos tantas y tantas realidades que nos desbordan”. “Lo decía el Quijote a Sancho, olvidar las raíces es demasiado peligroso. Cuando uno olvida las raíces de su vida a veces sabe dónde empieza pero no dónde termina”, advirtió.

En su primer Corpus también al aire libre, puesto que el año pasado, recién llegado a Toledo tuvo que celebrarlo a puerta cerrada, expresó cómo, a pesar de la pandemia “sigue siendo la ciudad hermosa que viste sus mejores galas para recibir al amor de los amores y cantar a aquel que viene a nosotros”.

Con la mirada puesta en Jesús Eucaristía, Cerro quiso dar aliento a cuantos sufren por culpa del coronavirus: “Lo primero que nos dice Jesús es ‘venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados y yo os aliviaré”. Desde ahí presentó al Corpus Christi como aquel que ofrece la alegría y el gozo “auténticos”. Junto a él, se encontraba también el arzobispo emérito de Toledo, Braulio Rodríguez, que ha sido el encargado de rezar el Alia.

Al frente de las autoridades civiles, se encontraba el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page que valoró que en esta ocasión se haya podido celebrar el Corpus, aunque sea “diferente”, pero confía en que “sea el último con restricciones”. Aun así, expresó cómo “aunque no se hubiera hecho nada, no hay toledano que no recuerde perfectamente el aroma y todos los sentidos que se ponen a flor de piel este día”.