¿Por qué casi todos los toldos de los pisos son verdes?

Con motivos ornamentales, estampados florales, rayados o lisos por un lado, perocasi siempre de color verde por la parte exterior. Los toldos son un elemento imprescindible en los hogares durante el verano; dan sombra a la vivienda cuando más lo necesita y ayudan a soportar las elevadas temperaturas de la época estival. Para muchas personas, el componente estético de estas cubiertas de lona pasa desapercibido, pero llama la atención que en la mayoría de los pisos de nuestro país la tela sea de color verde.

Tal es la popularidad del toldo verde, que hasta tiene un grupo de Facebook dedicado a “dotar al toldo verde de la atención que merece, posicionándolo como símbolo de significación identitaria y, por ende, patrimonial”, según explica en la descripción de la página su administrador, el arquitecto e investigador de la Universidad de Glasgow, Pablo Arboleda.

Tras varios años en el extranjero, Pablo regresó a España y se fijó en algo que había pasado desapercibido para él durante mucho tiempo: la mayoría de los toldos eran de color verde. Este hecho despertó la curiosidad del arquitecto, quien trató de buscar respuesta y acabó creando una comunidad de más de 3.000 personas que, como él, creen que el toldo verde debería ser considerado patrimonio arquitectónico. Arboleda defiende que, desde su aparición en los años 60, “es el elemento más característico de la arquitectura española de las últimas décadas”.

La Ley de Propiedad Horizontal es la que regula el cerramiento de las terrazas y la colocación de toldos. La normativa no establece ninguna gama de colores, por lo que resulta curioso que la mayoría de los españoles se haya puesto de acuerdo en esta cuestión.

Es la comunidad de vecinos la que en sus estatutos establece la estética que se debe respetar en la colocación de las pérgolas para cubrir las terrazas del sol. Por lo tanto, ningún vecino puede elegir el color, modelo y dimensiones del toldo con libertad si están especificados en el reglamento interno de la comunidad.

Es cierto que el color verde es el más habitual en los toldos que colorean las fachadas de los edifcios españoles durante el verano, pero también es frecuente ver otros tonos como el azul, naranja o amarillo. No se sabe si el verde aguanta mejor el desgaste producido por el sol, pero es el único color que cuenta con un club de seguidores y, para ellos, el toldo verde es casi como una religión.