La labor de las FF AA

La ministra Robles: «La vacuna es el mejor seguro de vida para todos»

La titular de Defensa destacó en Zaragoza la labor en la vacunación de la Operación Baluarte

La ministra de Defensa, Margarita Robles, visita la Unidad de Vacunación del Hospital General de la Defensa, en Zaragoza
La ministra de Defensa, Margarita Robles, visita la Unidad de Vacunación del Hospital General de la Defensa, en ZaragozaJavier CebolladaAgencia EFE

La ministra de Defensa, Margarita Robles, destacó ayer la labor que las Fuerzas Armadas está desarrollando para hacer frente a la pandemia del coronavirus, en el marco de la Operación Baluarte, donde, entre otras tareas, están apoyando al sistema sanitario en la campaña de vacunación para la dosis adicional contra la covid. En menos de una semana, más de mil militares de 150 unidades han inoculado 35.000 dosis en 13 comunidades autónomas, precisó.

Robles visitó la Unidad de Vacunación del Hospital General de la Defensa de Zaragoza, que fue la primera que se puso en funcionamiento, una vez que el Gobierno de España acordara que la sanidad militar reforzara las campañas de vacunación. Le han acompañado la subsecretaria de Defensa, María Amparo Valcarce; el coronel y director del Hospital, Juan Antonio Lara, y la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés. En el itinerario han pasado por el Centro de Vacunación, han conocido un equipo móvil para realizarla y han conversado con algunos de los rastreadores militares.

La ministra valoró el «contacto estrecho» del ministerio con el departamento de Sanidad aragonés y el trabajo de los militares en el marco de Baluarte, que dispone de 150 unidades de vacunación y más de mil militares repartidos por las 13 comunidades que solicitaron su apoyo y que, en menos de una semana, han inoculado la tercera dosis a más de 35.000 personas, según los datos de ayer, y la previsión de que sean entre 40.000 y 50.000 mañana.

Robles aprovechó su visita para llamar a la ciudadanía a vacunarse, «el mejor seguro de vida para todos», toda vez que ha recordado el esfuerzo realizado por los sanitarios civiles, médicos, enfermeros auxiliares de clínica y sanitarios militares, muchos de los cuales han perdido la vida en estos casi dos años de pandemia, por lo que «no se puede ser tan poco generoso e irresponsable» para no acudir a vacunarse. La ministra incidió en que «Defensa no va a regatear ningún esfuerzo» y prestará su apoyo a las comunidades «el tiempo necesario».

La consejera aragonesa, por su parte, agradeció a los militares su participación en la lucha contra la pandemia, una colaboración «magnífica, necesaria e indispensable» que potencia la cercanía con el ciudadano. Y apuntó que esta colaboración libera la presión de la atención primaria y expande la vacunación con equipos móviles a los centros y zonas «más comprometidas».

El Ministerio de Defensa, como se recordará, puso el pasado 27 de diciembre a disposición de las autoridades de las comunidades autónomas, además de los 1.500 rastreadores militares ya activos, 150 equipos para reforzar la vacunación, además de los centros sanitarios militares Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla y el Centro Sanitario de Vida y Esperanza, de Madrid, y el Hospital General de la Defensa, en Zaragoza.

La composición de personal de los denominados equipos móviles de vacunación (EMV) está compuesto por un oficial enfermero, personal sanitario (médico o enfermero), personal administrativo e informático, personal de emergencias en coordinación con los correspondientes de cada comunidad autónoma y un conductor. Este personal ha recibido la formación necesaria para llevar a cabo las funciones encomendadas dentro del plan de vacunación contra la covid.

El equipamiento disponible por Defensa para estos equipos móviles consta de un vehículo para el traslado del equipo, equipamiento para la conservación de la vacuna desde su recogida en el punto de abastecimiento, y en coordinación con ésta, hasta el punto de vacunación. Si el lugar de la vacunación no se encuentra bajo la dirección de un médico y no dispone de un equipo de soporte vital avanzado, el EMV deberá disponer de ambos en coordinación con los servicios correspondientes de las comunidades autónomas.