Vuelta al cole

Cepillado de dientes en niños: cuánto flúor debe tener la pasta infantil según la edad

En la vuelta al cole tus hijos deben seguir estos consejos para mantener boca y dientes sanos

Un grupo de niños se lavan los dientes - Fuente: AP
Un grupo de niños se lavan los dientes - Fuente: APlarazon

La vuelta al cole representa un regreso a las rutinas. Equivale a orden, a organizar horarios y costumbres que se habían descuadrado en el verano. Pero la vuelta al cole también supone un buen momento para la adopción de hábitos nuevos, como realizar deporte, andar más de lo que habituamos, proponerse comer mejor en familia, que los niños se vayan antes a la cama e instaurar, por ejemplo, nuevas rutinas como la de la higiene bucodental en los menores, tan fundamental para su desarrollo y salud futura.

Y es que la dentadura es para toda la vida, es parte fundamental de nuestra imagen y sinónimo de salud, y si aprendemos a cuidarla desde pequeños lo haremos siempre. “Los problemas en los dientes de leche pueden provocar maloclusión, malnutrición, infecciones, afectaciones en el habla y problemas de autoestima. Se debe cuidar la dentición desde bebé”, advierte el doctor Francesc Amorós, jefe de servicio de Odontología del Hospital Universitari General de Catalunya, en Sant Cugat del Vallès, Barcelona.

Precisamente, desde la Asociación Española de Pediatría (AEP) ven con buenos ojos el inicio de la etapa educativa y el inicio de unos buenos hábitos dietéticos e higiénicos. En este punto destaca la importancia de una buena nutrición para el cuidado de los dientes, basada en la abundancia de frutas y de verduras y sin abusar de carnes magras y productos lácteos.

No a los azúcares en la dieta

“Es muy importante evitar el consumo de alimentos y bebidas ricos en azúcares (golosinas, dulces, zumos, infusiones con azúcar y refrescos)”, afirma la entidad, ya que unos azúcares abundantes en contacto prolongado con el diente pueden favorecer las primeras caries desde la erupción del primer diente de leche.

“Unos correctos hábitos de higiene bucodental son la base para un buen estado de los dientes. Aunque los dientes de leche son temporales, se deben cuidar, ya que ocupan un espacio que, posteriormente, albergará un diente permanente”, explica el odontólogo de Quirónsalud.

Por otro lado, advierte de que si el diente se cae o se extrae de forma prematura por una caries, lo más probable es que el espacio quede ocupado por los dientes de los lados y cuando el diente permanente quiera salir no disponga de espacio para colocarse.

Consejos para una correcta higiene dental

Con todo ello, desde el servicio de Odontología del Hospital Universitari General de Catalunya recomiendan lo siguiente para una correcta higiene dental en los menores:

- La primera visita al odontopediatra debe ser antes de su primer cumpleaños, y no más tarde de los 3 años.

- Limpiar las encías del bebé una vez al día con una gasa húmeda, o bien con un dedal de silicona en el momento del baño.

- A partir de la salida del primer diente, lavar con un cepillo de filamentos suaves.

- Utilizar pasta dental que contenga 1.000 ppm de flúor (muy importante el cepillado por la noche). La cantidad de pasta debe ser como para manchar el cepillo dental o como un grano de arroz.

- A partir de los 3 años, utilizar pasta 1000-1450 ppm de flúor. Cantidad de pasta del tamaño de un guisante.

- A partir de los 6 años, cepillado con pasta 1450 ppm de flúor. Cantidad de pasta del tamaño de un guisante.

- Cepillar los dientes después de cada comida principal (tres veces al día), siendo la de la noche la más importante, y la duración del cepillado debe ser de 2-3 minutos.

- Escupir el exceso de pasta, pero no se recomienda enjuagar con agua.

- El cepillado dental infantil es efectivo si está supervisado por un adulto; se deben repasar las zonas que el niño no ha sabido o no ha podido cepillar.

- Es necesario cepillar todas las caras de los dientes (externa, interna y superficies masticatorias), y utilizar un hilo dental (a partir de los 3 años) por los espacios que hay entre los dientes.

- La pasta dental fluorada la deben administrar los padres y supervisar el cepillado nocturno hasta la adolescencia.

- Cada niño debe tener su propio cepillo de dientes, y se debe cambiar cada 2-3 meses o cuando los filamentos estén abiertos.

- Se deben cambiar los cepillos cada 2 meses en el caso de bebés, y cada 3 meses en caso de niños y adultos.

- Evitar introducir azúcar en la dieta si el niño es menor de 2 años; evitar que el niño coma constantemente (menos de 2 horas) galletas, chocolate, golosinas, yogures azucarados, zumos envasados, pan de molde, patatas fritas, snacks dulces o salados, bebidas con gas, entre otras. Recuerde que es la frecuencia de ingesta, no la cantidad, lo que aumenta el riesgo de caries.

- Una dieta sana y equilibrada rica en frutas, verduras, legumbres y lácteos es también de gran importancia para tener una boca sana.

Los padres pueden transmitir bacterias productoras de las caries

Por otro lado, desde la Asociación Española de Pediatría recuerdan que los padres pueden transmitir las bacterias productoras de la caries a sus hijos, por lo que detallan los siguientes consejos para evitarlo:

- Buena higiene dental por parte de los progenitores.

- No limpiar el chupete en la boca del progenitor para después pasárselo al bebé.

- No compartir utensilios con el niño, ni tampoco los cepillos de dientes.

- Es buena idea que los padres utilicen chicles de xilitol, una sustancia con la que se disminuye el número de bacterias en la boca de los adultos.