Caso Malaya
25 años de cárcel como máximo
l La pena que se ha solicitado para José Bretón es de 40 años de cárcel; ¿cumplirá la pena en su totalidad?
–La sentencia tendrá que adaptarse, obviamente, al objeto del veredicto y a las penas pedidas por las partes. Si especulamos y consideramos que el magistrado presidente aceptará la propuesta de pena máxima solicitada por el fiscal y el acusador particular, impondrá, efectivamente, 40 años de prisión. Y teniendo en cuenta que esos 40 años provienen de dos penas de 20 años cada una (por cada uno de los dos asesinatos), de acuerdo con las directrices marcadas por el Código, y principalmente según el fundamento preventivo especial de nuestro ordenamiento punitivo, podremos decir que el máximo de cumplimiento efectivo de la condena será de 25 años. Cosa distinta será el régimen de cumplimiento y modo de ejecución de esa condena. Teóricamente, Bretón no podría acceder al tercer grado hasta que hubieran transcurrido doce años y medio de cumplimiento, y no podría solicitar la libertad condicional hasta que hubieran pasado dieciocho años y nueve meses. Pero todo esto supone un ejercicio aún más arriesgado de especulación jurídica, porque no existiendo pronóstico favorable de reinserción social, podría no alcanzar nunca el tercer grado ni la libertad condicional, y permanecer los veinticinco años clasificado en segundo grado penitenciario. Pero, igualmente, y aunque fuera de modo excepcional, también podrían reducirse esos plazos, y obtener el tercer grado tras el transcurso de una cuarta parte de la condena (es decir, después de seis años y tres 3 meses de prisión) y la libertad condicional a los quince años, aproximadamente. E incluso podrían atenuarse aún más los plazos, si se dieran los presupuestos establecidos en el art. 104.3 del Reglamento Penitenciario, y así lo resolvieran en última instancia y según sus respectivas competencias Instituciones Penitenciarias y el Juez de Vigilancia Penitenciaria.
l ¿Puede obtener beneficios penitenciarios?
–Por supuesto, como cualquier otro condenado, en cuanto la sentencia sea firme. Los dos únicos beneficios que actualmente contempla la Ley son el indulto y el adelantamiento de la libertad condicional. Respecto al primero, el jurado ha pedido que no lo solicite el Tribunal (si bien podrán solicitarlo otros interesados); y respecto al segundo, todo dependerá de cómo transcurra la estancia de Bretón en prisión, su tratamiento y su participación activa en las actividades que se le señalen. Lo que ha vetado el jurado (que, por otro lado, legalmente tampoco cabría) es la suspensión o la sustitución de la pena impuesta.
l Una vez conocido el veredicto, ¿hay posibilidades de que sea trasladado de cárcel?
–José Bretón se encuentra en prisión provisional y por lo tanto continuará en la cárcel. Una vez se dicte sentencia por parte del magistrado presidente del tribunal del jurado, imagino que su defensa recurrirá, con lo cual Bretón permanecerá en situación de preso (no de condenado), y por lo tanto en la cárcel, hasta que la sentencia sea firme.
l ¿La madre podrá recibir los huesos que han analizado los forenses?
–Se trata de pruebas, de piezas de convicción que podrían ser necesarias a la hora de resolver futuros recursos. En ese sentido, aunque podrían devolverse a la madre, lo aconsejable es que permanecieran en sede judicial hasta que haya sentencia firme. Y en todo caso, y en última instancia, que no se incineren.
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