Adiós a la app Frontback y el tris tras, por delante y por detrás

Vio la luz en julio de 2013, cuando los selfies empezaban a hacer su agosto, con el respaldo de celebrities como el actor Ashton Kutcher o el primer ministro belga. Frontback, una app que permitía tomar una foto con la cámara trasera y al mismo tiempo inmortalizar la reacción ante lo que se estaba viendo con la delantera fue muy bien recibida por la prensa tecnológica en su nacimiento.

Con la crítica y los famosos a su favor, Frontback lo tenía fácil con los inversores. En estos dos años han recaudado 4 millones de dólares e incluso llegaron a escucharse rumores de que Twitter quería comprarles. Además, la herramienta fue elegida a finales de 2014 como una de las mejores aplicaciones del año de Android por la mismísima Google.

Sin embargo, todo esto no ha conseguido que la app se mantenga con vida. El negocio de las apps fotográficas y el de las autofotos tiene overbooking y es muy cruel. “Era una idea fresca y verdaderamente el corazón de nuestra visión, pero el concepto ha sido adoptado de forma masiva hoy y, desafortunadamente, Frontback no es la ganadora”, explica en un post el fundador, Freed della Fraille. El emprendedor destaca que hasta los smartphones de Samsung tienen posibilidades para añadir imágenes de ambas cámaras en una.

Desde Frontback han querido enfocarse en la calidad de los usuarios, no en la cantidad, pero el problema es que no han atraído a suficientes personas como para hacerla sostenible. La falta de masa crítica ha supuesto su muerte temprana. “Aunque hemos visto resultados interesantes en algunas comunidades, para la mayoría de nuestros miembros se necesita mucho tiempo y esfuerzo para entender por qué Frontback es diferente, lo que resulta poco frecuente en nuestro producto”, señala della Fraille.

El servicio pasará a mejor vida el próximo 15 de agosto, aunque los usuarios podrán exportar sus datos hasta el 15 de septiembre. Tras esa fecha, las fotos y la información personal serán eliminadas permanentemente de sus servidores. La app de iOS se mantendrá para quedarse como una “app de cámara despojada” que no tendrá interacciones sociales o feedback mientras la de Android será retirada de Google Play.