Homenaje a Félix de Azara, un cartógrafo metido a naturalista

El cartógrafo y naturalista español Félix de Azara (1742-1821), pionero en el estudio de la fauna y flora paraguaya, será homenajeado en Asunción con motivo del 230 aniversario de su llegada al país sudamericano, donde trazó las fronteras entre las posesiones coloniales de Portugal y España.

El homenaje constará, entre otros actos, de una exposición en el Archivo Nacional, entre el 20 y el 29 de octubre, donde se podrán ver primeras ediciones de sus libros y algunos de sus mapas, todos propiedad de esa entidad, dijo a Efe Pablo Desportes, ministro consejero de la Embajada de España, una de las organizadoras.

«El objetivo es dar a conocer las distintas facetas de Azara, la de naturalista, cartógrafo y la del ingeniero militar oscense que vino a trazar los límites fronterizos de España y terminó investigando la flora y fauna de Paraguay», declaró.

Esas vertientes serán analizadas por los invitados al seminario internacional que debatirá su figura el 21 y 22 de octubre, parte de un homenaje en el que también participan la Secretaria Nacional de Cultura y la Cancillería paraguayas.

«Queremos rendir homenaje a una figura que ha sido muy importante para conocer el Paraguay del siglo XVIII. Busca recuperar una figura polifacética que se ha ido apagando y que en su época tuvo su reconocimiento», señaló Desportes.

Félix de Afara llegó a Paraguay como integrante de la comisión que delimitó las nuevas fronteras hispano lusitanas en sus colonias americanas tras la firma del Tratado de San Idelfonso (1778).

La demora en esa misión, debido a la escasa iniciativa de Portugal por definirlas, fue la razón de que permaneciera 20 años en Paraguay, donde se dedicó a viajar y a estudiar sus especies y plantas.

«Los portugueses no tenían mucho interés en fijarlos, estaban más interesados en ocupar los territorios españoles, lo que le dio tiempo a explorar la flora y fauna», explicó Desportes.

Resaltó también que las dos facetas son igual de destacables, aunque la de naturalista es la más reconocida, pese a que fue un autodidacta, siendo su profesión la de ingeniero militar.

«Su obra fue muy reconocida especialmente en Francia, donde su hermano, José Nicolás de Azara, era embajador de España y le dio a conocer al mundo científico francés. Pero con el paso del tiempo su figura se ha diluido», dijo Desportes.

Félix de Azara publicó varios libros sobres sus viajes y observaciones por Paraguay, que le convirtieron en un naturalista conocido en todo Europa.

El homenaje culminará a finales de mes con la inauguración de un estatua, obra del escultor paraguayo Juan Pablo Pistilli, en el Jardín Botánico de Asunción, junto al Museo de Historia Natural.

La estatua es una donación de España a la municipalidad de la capital paraguaya.