Cómo hablar con los hijos de un suceso trágico

La Fundación Anar ha elaborado un decálogo para ayudar a los padres a afrontar momentos difíciles y a explicarles a sus hijos lo que está ocurriendo.

Atentados, catástrofes naturales, accidentes aéreos... A lo largo de la vida, es inevitable pasar por momentos difíciles y complicados y es importante saber afrontarlos para poder seguir adelante a pesar del dolor. Es tarea de los padres explicar a sus hijos este tipo de sucesos para que sepan que en su camino pueden encontrarse con situaciones inesperadas y dolorosas que pueden cambiar su perspectiva sobre el mundo en que vivimos. Por ello, la Fundación Anar ha elaborado un decálogo para ayudar a afrontar este tipo de situaciones.

1. Explicar el suceso: Es importante dar una explicación adaptada a la edad menor sobre lo que ha sucedido. Hacedlo con la mayor calma de la que seáis capaces y procurad transmitir cercanía y seguridad con vuestras palabras.

2. No mentir: No se debe cambiar la realidad de lo que ha sucedido con la intención de protegerlos. Es importante que contar la verdad, pero sin añadir dramatismo ni entrar en detalles que puedan dañar su sensibilidad.

3. Controlar las emociones, pero no reprimirse: En el momento en que esté hablando su hijo trate de mantenerse lo más serenos posible, pero no reprima sus sentimientos de tristeza y dolor. No pasa nada por mostrarse triste ante un suceso doloroso porque eso demostrará a sus hijos que somos humanos, pero es importante tratar de no desmoronarse. Esto ayudará también a los niños a que no repriman los suyos y se mustren seguros haciéndolo.

4. Ayudar a identificar las emociones: Cuando se habla sobre un suceso trágico o una catástrofe es inevitable hablar de tristeza, dolor, rabia, impotencia... Pero sin dejarse llevar por estos sentimientos. Esto ayudará a los hijos a identificar cómo se sienten y ponerle nombre. De esta manera aprenderán a identificar sus emociones y sentimientos y a manejarlos para que no sean éstos quienes les manejen a ellos.

5. Transmitir la idea de que somos vulnerables. Cuando ocurren situaciones catastróficas e inesperadas es cuando nos damos cuenta que el ser humano es limitado y vulnerable. Sin embargo, tenemos la capacidad de remontar los momentos difíciles y seguir adelante a pesar de la tristeza y el dolor. Hay que explicar esto a los hijos para que entiendan que los seres humanos, a pesar de nuestras limitaciones, somos capaces de superar las adversidades y continuar nuestro camino.

6. Responder sus dudas: Es posible que en un primer momento, no se les ocurran preguntas que pueden hacerlas más tarde, cuando hayan pensado sobre vuestra conversación. Mostraos abiertos a responder sus dudas, tratando de ofrecer cuanta información tengáis a vuestro alcance adaptándola a su nivel de madurez.

7. Hablar de solidaridad colectiva. En momentos en los que se ha producido una catástrofe colectiva, es importante hablar de lo necesario que es que las personas, afectados directamente o no, estemos unidas para apoyar a aquellos que lo necesitan dentro de nuestras posibilidades y según nuestros recursos. De esta manera también estás transmitiendo valores positivos como la solidaridad y la empatía.

8. Explicar la diversidad humana: Existen distintas creencias, religiones y valores que llevan al ser humano a actuar de una u otra manera. Todas las creencias son válidas a excepción de las que generan dolor en las personas. Sin embargo, a pesar que haya personas que buscan hacer daño, la mayoría busca la paz colectiva.

9. Prestar atención a lo que pasa días después: Cada niño puede tener reacciones distintas ante un mismo suceso. Por eso es importante que los padres estén pendientes en los días posteriores a hablar de la noticia para poder canalizar adecuadamente sus reacciones.

10. Pedir ayuda. Si después de todo lo anterior, siguen teniendo dudas, pueden pedir ayuda. Anar dispone de un servicio de correo electrónico a través de nuestra página web (ww.anar.org) o bien llamando al Teléfono Anar del Adulto y la Familia 600 50 51 52.

También puedes decirle a tus hijos/as que, si lo desean, se pueden comunicar con nosotros a través del Teléfono ANAR de Ayuda a Niños y Adolescentes

900 20 20 10, que es gratuito, y del Email ANAR.