Hostelería

Se acabaron las cocinas sucias

Alberto Chicote regresa hoy a laSexta a las 22:30 con la quinta temporada de «Pesadilla en la cocina»

En la primera entrega se enfrentará a un restaurante de lujo en un barco
En la primera entrega se enfrentará a un restaurante de lujo en un barcolarazon

Alberto Chicote regresa hoy a laSexta a las 22:30 con la quinta temporada de «Pesadilla en la cocina»

Es, a partes iguales, el terror de las cocinas, la solución a muchos negocios y el responsable de que muchos miremos con recelo de reojo las cocinas de los sitios a los que vamos. Ha visto todo tipo de irregularidades en bares, tabernas y restaurantes y, para suerte del público, aún le queda mucho más por mostrar a la audiencia. «Hemos visto 50 restaurantes y durante este tiempo la experiencia me dice que se pueden seguir encontrando casos. Apuesto por que podamos hacer diez temporadas». Estas palabras las pronunció a Alberto Chicote en la rueda de Prensa que tuvo lugar ayer con motivo del comienzo de la quinta temporada de «Pesadilla en la cocina», que llega esta noche a laSexta a las 22:30 horas. Un cocinero, empresario, presentador y algo que está muy de moda hoy en día, «coach», aunque él no lo tenga muy claro: «No sé lo que es el ‘‘coaching’’. Yo sé sentarme con una persona que tiene un problema en su local ver qué es lo que ocurre y ayudarle», confiesa.

Menú renovado

Un total de 13 episodios son los que se podrán disfrutar esta temporada. Entregas que pondrán a prueba la paciencia del chef, ya que se encontrará con un cocinero dispuesto a agredirle, a otro que habla con los alimentos o que se va a casa a ducharse después de un servicio o al chef más sucio que ha pasado por el programa. En la entrega de hoy, Chicote se desplazará a Badalona, donde se embarcará en el Némesis, un restaurante de lujo en un barco en el que las camareras son go-gós, sirven chuletones en alta mar y ni siquiera hay mesas.

El espacio regresa con un menú renovado en el que dejará a un lado las tabernas, los restaurantes clásicos y las casas de comidas, para ayudar en el resturante de un cámping, en uno de carretera u otro que, a pesar de encontrarse en la zona más turística de Madrid, está practicamente vacío. Parece mentira que después de cuatro temporadas siga habiendo cocinas en esta situación, lo que el cocinero achaca a una falta de criterio: «Para mucha gente la cocina es un lugar caótico y sucio por naturaleza. Es verdad que el aceite salpica y las cosas se manchan, pero también se limpian».

A pesar de que parezca que ciertos trabajadores pueden con su paciencia, el chef tiene muy claro que está para ayudar a que estos negocios remonten, ya que «intentamos dar una oportunidad a locales que de ningún otro modo la tendrían sin nuestra visita», afirma. Una ayuda necesaria y fructífera, ya que Chicote explica con orgullo que «el 70 por ciento de los locales que hemos atendido siguen abiertos actualmente, mientras que el 30 por ciento restante han cambiado de dueños, han sido traspasados o han cerrado».

Con ello, reitera un año más que esta temporada «es la mejor que hemos hecho hasta ahora» y avanza: «El día que veáis el anuncio de ‘‘Pesadilla en la cocina’’ en Utrecht cancelad todo lo que tengáis para esa noche. No puedo decir nada porque sería ‘‘spoiler’’, pero no olvidéis esa ciudad». En esta localidad de los Países Bajos, Chicote ayudará a un resturante español regentado por un uruguayo de raíces españolas más preocupado por montar espectáculos de flamenco durante el servicio que por la calidad de la comida. Allí asistirá a reacciones inesperadas que jamás habría imaginado.