Violencia de género

Cuenca, una cárcel sin riesgos para Morate

Ante su temor a ser agredido por presos ucranianos, fuentes internas precisan que «no hay ninguno»

Sergio Morate durante su detención en Rumanía
Sergio Morate durante su detención en Rumaníalarazon

El comisario de la provincia de Timis, Dan Stoianescu, reconoció ayer que Sergio Morate, el presunto asesino de las jóvenes Marina Okarynska y Laura del Hoyo, será interrogado «en los próximos días» para intentar determinar la complicidad de Istvan Horvath, el ciudadano rumano que alojó a Morate en un domicilio de la localidad de Lugoj. En declaraciones a Efe, el responsable policial señaló que el coche con el que el fugitivo huyó, un Seat Ibiza verde, se encuentra custodiado por las autoridades rumanas para próximamente llevar a cabo una inspección que trate de encontrar algún tipo de prueba que pueda ayudar en la resolución del caso.

Las intenciones de la Policía del país rumano deberían llevarse a la práctica con la mayor celeridad posible teniendo en cuenta que los trámites burocráticos para la extradición del detenido llevan abiertos desde el pasado viernes, por lo que se espera que la vuelta de Morate a España no se demore demasiado. Una vez en territorio nacional, el destino que le espera es el Centro Penitenciario de Cuenca, la prisión más cercana al juzgado de instrucción encargado del caso. Será un escenario que le resultará familiar a Morate. De allí salió en 2011 tras cumplir una condena de algo más de un año internado en el módulo de ingresos –donde coincidió con Istvan Horvath–, un pequeño bloque destinado a aquellos presos que nunca habían visto privada su libertad o que esperaban ser destinados a otros módulos.

La realidad de la cárcel conquense, que lleva en funcionamiento 35 años, no se aleja mucho del resto de centros penitenciarios del país. Según afirman fuentes internas de la institución a este periódico, «se trata de una cárcel muy tranquila» en la que no destaca ningún recluso «de especial relevancia» pese a que «todo el catálogo de delitos está representado» en el centro atendiendo al historial de los delincuentes allí encerrados. Además, entre el abanico de criminales no parece encontrarse ninguno de nacionalidad ucraniana, lo que supuestamente constituía uno de los temores de Morate. Y es que según la abogada del detenido, Claudia Candea, Morate temía a la familia de Marina, de origen ucraniano, por tener contactos que podrían poner en peligro su vida, incluso en una cárcel española.

De confirmarse la condena, la estancia de Morate se desarrollaría en el módulo 3, en el que en teoría se localizan los internos más conflictivos y con mayores penas por cumplir. Por su parte, en el módulo 2 se alojan aquéllos a los que les resta un menor tiempo entre rejas. Finalmente, en el módulo 1 residen los reclusos que tienen algún destino de trabajo o que se encuentran refugiados de los otros módulos.

En total, el centro dispone de 60 celdas –habilitadas para albergar dos presos cada una– a las que hay que sumar otras 13 células complementarias. De acuerdo con los últimos datos aportados por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, la prisión de Cuenca contaba en 2014 con124 presos penados, de los cuales únicamente seis eran mujeres.