Sucesos

El juez desmonta la defensa de Bretón a cuatro meses del juicio

La cadena de custodia de las pruebas no se ha visto comprometida. El proceso con jurado comenzará a mediados del mes de junio

José Bretón mira al juez Rodríguez Laínz durante una de las inspecciones de la finca de Las Quemadillas
José Bretón mira al juez Rodríguez Laínz durante una de las inspecciones de la finca de Las Quemadillaslarazon

José María Sánchez de Puerta tiene cada vez menos argumentos para defender la inocencia de José Bretón, que supuestamente acabó con la vida de sus hijos el 8 de octubre de 2011, en un juicio con jurado popular que se celebrará antes del verano.

José María Sánchez de Puerta tiene cada vez menos argumentos para defender la inocencia de José Bretón, que supuestamente acabó con la vida de sus hijos el 8 de octubre de 2011, en un juicio con jurado popular que se celebrará antes del verano. El titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba, José Luis Rodríguez Laínz, emitió el pasado viernes el último auto de apertura del juicio oral en el que indica que «es un planteamiento absolutamente razonable» afirmar que los restos humanos encontrados en Las Quemadillas, finca a las afueras de Córdoba propiedad de los abuelos de Ruth y José, «se corresponden con los cadáveres de los dos hijos de José Bretón». Asimismo, tira por tierra los argumentos esgrimidos por Sánchez de Puerta e indica que decir lo contrario es a todas luces «irrazonable o inverosímil», según confirmaron a este diario fuentes de la familia.

De hecho, añade que Bretón «no contaría con restos humanos de origen desconocido de niños de esas edades a su disposición para dejarlos en la fogata, coincidiendo con la pretendida pérdida accidental de sus hijos posteriormente. No tendría mucho sentido poder autoinculparse de la muerte de dos niños desconocidos y, encima, de la desaparición de los propios», según las mismas fuentes.

Actuó en solitario

En cuanto a la sucesión de hechos del día de autos, Rodríguez Laínz tiene claro que Bretón recogió a los niños en casa de sus padres, los trasladó a la finca de Las Quemadillas, acabó con su vida y preparó una especie de horno para deshacerse de los restos. El juez defiende que no contó con la ayuda de nadie y que no existe ningún indicio de que recibiera apoyo ninguno de una tercera persona: «Durante el tiempo de la combustión de la hoguera, tras el aporte de acelerante durante un espacio de tiempo de unos cuarenta minutos aproximadamente, salvo el último tramo (a partir de las 17:30 horas), la única persona que se encontraba dentro de la parcela con los menores era el encartado». Para apoyar esta afirmación, alega que desde que el principal sospechoso del crimen entró en la finca, alrededor de las dos de la tarde, hasta que abandonó el lugar a las 17:30 horas, no se registró ningún movimiento en la puerta de entrada a la finca.

«Habría sido imposible que un tercero hubiera entrado en la parcela y dejado los restos de menores de esas edades, o de los niños, tras hacerse con ellos en el Parque Cruz Conde o en cualquier otro sitio, y conseguir, sin alimentar aún más la hoguera, la práctica incineración de los cadáveres», razona. Por todo lo anterior, el togado estima que no es posible que «alguien hubiera sido tan meticuloso como para aprovechar, sin quemarse, las ascuas y colocar de forma creíble para expertos en antropología los restos óseos». Tampoco ve probable que alguien lo hubiera hecho con la intención de incriminar al padre de los menores.

Otro de los puntos que, según Rodríguez Laínz, indican que Bretón planeó y ejecutó su plan en solitario es la hoguera, que alcanzó su pico de temperatura más alta a la hora en la que el encausado abandonaba el lugar. «Cualquier intento de alargar el margen de tiempo utilizado por el informe, hasta las 17:40 horas, supondría la presencia de una tercera persona en el interior de la parcela, hipótesis respecto de la que no contamos con el más mínimo indicio, por lo que es evidente que la hoguera es manejada en todo momento por el procesado única y exclusivamente».

Además de la sucesión de acontecimientos, el titular del juzgado número 4 de Córdoba hace una defensa cerrada de la labor policial y del antropólogo forense Francisco Etxeverría. En el auto, responde a los intentos de Sánchez de Puerta de desacreditar la labor de los investigadores que participaron en el caso. Rodríguez Laínz manifiesta en su escrito que «no hubo desprecinto ni examen previo a la resolución de 14 de agosto de 2012 que daba vía libre a tal desprecinto para el análisis visual de los huesos», lo que indica que cuando Etxeverría se trasladó a Madrid para analizar los restos, lo hizo «gracias a las fotografías facilitadas por la acusación particular y la Policía, previa consulta personal a la autoridad judicial, como paso previo a una decisión sobre la retirada de los precinto».

Tras este auto, la defensa se queda prácticamente sin argumentos. La semana pasada, José María Sánchez de Puerta, pidió la libre absolución de José Bretón, al considerar que perdió a los niños en un descuido en el parque Cruz Conde de la capital cordobesa, lo que no supone infracción penal alguna. Asimismo, pidió la anulación del procedimiento abierto contra su defendido al considerar que se han violado sus derechos fundamentales, la tutela efectiva de las pruebas y por la imposibilidad de que se celebre un juicio con todas las garantías.

El magistrado de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Córdoba, Pedro Vela Torres, presidirá el juicio con jurado contra José Bretón, que se prevé celebrar antes del verano, en torno «a mediados de junio». El presidente de la Audiencia Provincial, Eduardo Baena, confirmó ayer que la elección se produjo en la mañana de ayer, informa Ep. El escrito de la la acusación y la Fiscalía piden para Bretón 40 años de prisión por supuestos asesinatos con alevosía, mientras que la defensa solicita la absolución para el padre de Ruth y José.

El siguiente paso tras la elección del magistrado son las cuestiones previas de las partes. La defensa pedirá la nulidad del procedimiento, y el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía resolverá los recursos. Después se dictará el auto de hechos justiciables y se abrirá el periodo de selección del jurado entre 36 personas, y se señalará el día para el inicio del juicio oral. En este sentido, Baena precisa que «lo normal es que no se celebre después del verano» y pronosticó para «mediados de junio», teniendo en cuenta que en octubre de 2013 José Bretón cumple los dos años de prisión preventiva, tras ingresar en el Centro Penitenciario de Alcolea, en Córdoba, el 21 de octubre del año 2011.