España, por primera vez, «libre» del sarampión

Aunque sí se han registrado algunos casos, su origen es importado, condición de la OMS para decretar que un país se ha liberado del virus. La rubeola casi ha desaparecido. En 2014 sólo se diagnosticó en 14 pacientes, la mayoría de fuera de nuestras fronteras

Europa está «más cerca que nunca» de eliminar el sarampión y la rubeola, decía la Organización Mundial de la Salud (OMS) la pasada semana. La Comisión Europea de Verificación Regional para el sarampión y la eliminación de la rubeola (RVC), que pertenece a la OMS, presentó las conclusiones de su último congreso: 32 países europeos ya podían considerarse «libres» de ambos virus, después de declarar que hasta 2014 habían pasado 36 meses (12 en el caso del sarampión, 24 en el caso de la rubeola) sin presentar contagios. Un hito de salud pública que es posible gracias a las medidas de prevención y, sobre todo, a las altas tasas de vacunación. España no está exenta de este certificado. Concretamente, fuentes de la OMS confirmaron a LA RAZÓN que nuestro país «no presentó casos endémicos de sarampión» en ese periodo, algo también confirmado a este diario desde el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. «Es la primera vez que España alcanza ese estatus», añadieron dichas fuentes. En cuanto a la rubeola, desde este organismo sanitario aclaran que en España ya se había «interrumpido» la transmisión del virus en 2013, por lo que, en este sentido, la situación se mantiene. Estos datos a nivel europeo han provocado que la OMS considere que se está «cerca» de erradicar el sarampión en Europa, un reto que hace cinco años se planteaba lograr precisamente a finales de 2015.

La OMS aclara que, para que los países alcancen este estatus, no deben darse casos autóctonos, pero sí pueden detectarse «importados o relacionados con la importación». Los primeros son aquellos con «evidencia virológica o epidemiológica» procedentes de fuera del país al que llegan y que comprenden un periodo de entre 7 y 18 días para el caso del sarampión, y de entre 12 y 23 para la rubeola. Los segundos son los que sí afectan a la población local aunque fueron causados por un caso procedente del extranjero. «Si en este caso la transmisión del virus persiste durante un periodo superior o mayor a 12 meses, los casos ya son considerados endémicos», aclaran en la OMS.

Esto explicaría por qué España puede considerarse libre de las enfermedades pese a presentar casos. Un informe realizado por la Junta de Andalucía señalaba que, durante el primer semestre de 2015, se detectó un brote de sarampión en Granada y se contabilizaron finalmente 15 casos. Sin embargo, el documento aclara que dicho brote «comenzó con dos personas adultas que llegaron a Granada capital desde países de Europa en periodo de incubación», y que «la transmisión se realizó fundamentalmente por contacto en las urgencias de los centros sanitarios y de forma intrafamiliar».

Del mismo modo, el registro del Centro Europeo para el Control y la Prevención de las Enfermedades (ECDC) señala que, desde enero de 2015 hasta enero de 2016, España ha registrado un total de 36 casos de contagio por sarampión. En la OMS aclaran que será en el próximo congreso del RVC, en octubre, cuando se determine si todos estos casos son importados y España conserva su estatus o, por el contrario, alguno de ellos es endémico. Sean autóctonos o no, lo cierto es que el pasado año se produjo un brusco descenso. Según los datos del ECDC, en España se registraron 153 casos, por lo que la disminución de contagios en 2015 fue superior al 76 por ciento. En 2013, la cifra fue de 131 mientras que en 2012 fue de 446. Así, desde 2012 hasta el pasado enero, el descenso de contagios en nuestro país ha alcanzado el 91 por ciento.

Los datos que recoge la OMS y que demuestran el declive de estas dos enfermedades en la UE buscan algo más que la mera estadística, ya que desde hace varios años se busca la erradicación en todos los países para el año 2020. Es por ello que, desde hace varios años se ha creado el Plan Nacional para la Eliminación del Sarampión y la Rubeola. Con esta iniciativa, nuestro país busca eliminar estas dos enfermedades dos años antes de la fecha fijada por la OMS. Es decir, en 2018. Así, de acuerdo con el último análisis del Plan, de 2013, concluye que se identificaron 14 casos importados y 103 relacionados con la importación, «ninguno endémico», recalca el informe. La mitad de los casos importados se habían contagiado en otro país europeo, mientras que el otro 50 por ciento tenía origen extracomunitario. De Bangladesh y de India, principalmente. El estudio destaca que «se ha interrumpido la transmisión endémica del sarampión y de la rubeola», pero alerta de que «existe riesgo de que se restablezca debido a los bajos niveles de inmunidad de la población en al menos cuatro comunidades autónomas». Tras la intensa onda epidémica de 2010 a 2012, en 2013 se consiguieron reducir el tamaño y los brotes de sarampión. «Todo ello nos sitúa en el escenario de la última fase de eliminación, en el que se espera que las importaciones del virus sólo generen brotes de pequeño tamaño por falta de individos susceptibles», recalcan desde el Instituto de Salud Carlos III. Eso sí, insisten en la necesidad de controlar las bolsas donde se pueden generar brotes, como los grupos «antivacuna».