Sucesos

Hallado en Londres el cadáver de Salva, un canario desaparecido

Tenía 22 años y trabajaba como camarero en un hotel. Localizaron su cuerpo el miércoles.

El joven de 22 años de Gran Canaria
El joven de 22 años de Gran Canarialarazon

Tenía 22 años y trabajaba como camarero en un hotel. Localizaron su cuerpo el miércoles.

Juanjo Sánchez, hermano de Salva, preocupado al no tener noticias de su hermano, lanzó una alerta en las redes sociales. Salva, como le llamaban sus amigos, trabajaba como camarero en un hotel de Londres y tenía que haber vuelto a casa para descansar unos días, vecino de Arinaga, en el municipio de Agüimes (Gran Canaria), el pasado domingo, pero nunca lo hizo. No llegó a embarcar en el vuelo que debía coger. «Si alguien sabe algo, por favor, comunícamelo lo antes posible. Ya están las denuncias por desaparición interpuestas». Esa era la petición de la familia de este joven. Buscaban información. «Desde el sábado a mediodía, cuando cogía el tren para trasladarse al aeropuerto, ya no hemos podido hablar más con él. El domingo esperamos su llegada, pero no apareció», afirmó la tía del desaparecido, Francisca Melián a «Este Canal TV».

Juanjo, que trabaja como enfermero en Alemania, decidió trasladarse a Londres para intentar recabar más información sobre la extraña desaparición de Salva, que residía en Surrey, cerca del Surbiton Health Centre (un centro de salud próximo a la estación de tren de Surbiton) y trabajaba como camarero en Brooks Kingston Lodge Hotel, a las afueras de Londres. Un establecimiento de cuatro estrellas a unos diez kilómetros del centro. Tras no llegar a Gran Canaria, la familia se puso en contacto con la Policía Nacional de Telde para interponer la denuncia, así como contactar con las autoridades inglesas. Sólo unos días más tarde llegaba la mala noticia.

El hermano relató ayer a LA RAZÓN que «encontraron un cuerpo que coincidía con la descripción de mi hermano. Ayer (miércoles) por la tarde sobre las seis me lo comunicaron y hoy he ido a identificarlo. El resto está bajo secreto de sumario y la Policía británica continúa con la investigación». En lo que se refiere a las circunstancias que rodean a la muerte del joven canario, Juanjo aseveró a este diario que los agentes manejan una hipótesis que «no daré hasta que no me lo autoricen».

El delegado del Gobierno en Canarias, Enrique Hernández Bento, pidió «prudencia» e informó que la embajada española en Reino Unido ya estaba informada sobre el suceso e iba a colaborar con la repatriación del cuerpo del fallecido.

El joven no sólo pensaba tomarse unos días de asueto en su casa, sino que, como explicó su tía a «Radio Agüimos», «ya había concertado una cita con el dentista, sólo un día después de aterrizar». Tras la pérdida de contacto el pasado sábado al mediodía, «sus amigos de Inglaterra pusieron una denuncia allí», mientras que la familia hacía lo mismo ante la Policía Nacional española.

Los vecinos de la zona de Arinaga aún están conmocionados por lo sucedido. Es más, LA RAZÓN se puso en contacto con Rubén, uno de sus mejores amigos, que también se desplazó a Londres junto a Juanjo para intentar ayudar en la búsqueda de su amigo, pero la tristeza no le permitió articular palabra.