La traición de la mujer del Chicle

Al asesino de Diana Quer le ha llegado el rumor de que su mujer se ve con su cuñado. Sus familiares dicen que «está muy mal».

«La relación entre Juan Enrique Abuín Gey, alias “El Chicle”, y su mujer Rosario Rodríguez ha saltado por los aires. Al asesino confeso de Diana Quer le ha llegado el rumor de que, la que todavía es su mujer, se está viendo de forma asidua con otro hombre, concretamente su cuñado (el marido de la hermana de ella) y eso le martiriza. Además, ha dejado de visitarle, de cogerle las llamadas cuando él usa el teléfono de la prisión y tampoco le responde a las cartas que le escribe compulsivamente. «Está muy mal», confirman sus padres en una entrevista a TVG, «ha intentado suicidarse dos o tres veces porque ella quiere dejarle, ni le escribe, ni le habla, ni nos deja a nosotros ver a nuestra nieta».

A su sensación de desesperanza y traición se ha sumado, en las últimas horas, la noticia de que un nuevo juzgado acaba de comenzar a investigarlo por agresión sexual. Así lo anunció el Tribunal Superior de Justicia de Galicia en una nota de prensa: «El Juzgado de instrucción número 2 de Noia ha acordado reabrir la causa iniciada en su día contra José Enrique por un presunto delito contra la libertad sexual». Se refiere a la denuncia que en el año 2005 presentó contra él Vanesa, la hermana de Rosario: «Cuando estaba delante de casa para ir al instituto pasó él con el coche», comenzó relatando en la denuncia. «Me invitó a subir y me dijo que hacíamos una gestión en Rianxo y luego me llevaba a clase. Subí, pero era mentira. Me llevó a un descampado y allí sacó un cuchillo de la guantera. Me dijo que contaba hasta diez y que me sacase la ropa. Obedecí porque tenía miedo. Entonces me enseñó unos preservativos y me preguntó qué sabor quería. Me negué a practicar sexo oral y entonces el me agredió sexualmente. Yo me quedé quieta hasta que terminó. Luego tiró el condón por la ventanilla y la caja. Me amenazó diciéndome que si contaba algo mataría a mi hermana, a mi sobrina y luego se suicidaría».

Acabó denunciando, pero para cuando acudieron a hacer la inspección ocular del lugar las pruebas habían desaparecido o no supieron encontrarlas. Además, el informe de los psicólogos del juzgado apuntó a que la menor de edad mentía y que Abuín Gey era víctima de una fabulación. El caso fue archivado. Ahora, sin embargo, se ha reabierto porque la jueza «ha visto similitudes en el modus operandi entre estos hechos y otros que se le atribuyen, lo que refuerza la veracidad de la denuncia inicial. Además se cuenta con testigos que nunca llegaron a declarar en sede judicial». El asesino confeso de Diana Quer se teme que esos nuevos testigos en realidad sean uno solo, su todavía esposa Rosario, que en su día lo apoyó, pero que según algunas fuentes podría haber contado todo lo que sabe quizá como venganza a que Abuín Gey, tras negarse a firmar el divorcio, quisiera implicarle en el crimen de Diana Quer a través de una carta que envió a sus padres.

La madre y hermana de Diana Quer encabezan hoy precisamente en la madrileña Puerta del Sol una concentración para reclamar la no derogación de la prisión permanente revisable».
La concentración rendirá homenaje a la joven de 18 años asesinada en la madrugada del 21 al 22 de agosto de 2016 en la localidad coruñesa de Puebla del Caramiñal y a otras víctimas inocentes. La hermana de Diana también leerá un poema de Benedetti.