Violencia de género

Los ocho nietos que «renegaron» de la abuela Carmen

Reportaje / Crimen en el seno de la familia del ex presidente de la CAM. Todo explotó en una reunión empresarial en septiembre. Le dijeron que no querían saber nada de ella

Una casa por hijo. En la imagen aparece el chalé de «Doña Carmen» (arriba a la izda.), el del único hijo varón (abajo a la izda.) y los tres chalés de las hermanas
Una casa por hijo. En la imagen aparece el chalé de «Doña Carmen» (arriba a la izda.), el del único hijo varón (abajo a la izda.) y los tres chalés de las hermanaslarazon

Crimen en el seno de la familia del ex presidente de la CAM. Todo explotó en una reunión empresarial en septiembre. Le dijeron que no querían saber nada de ella

La unión que la familia Sala Martínez mostraba de cara al público no era tal. La mala relación entre el único hijo varón de Vicente Sala, ex presidente de la antigua Caja Mediterráneo (CAM), y Carmen Martínez y sus tres hermanas les alejaba cada vez más de la idea que se tenía de esta acaudalada familia en su localidad , a la que medios de la zona denominaban «los Kennedy de Alicante».

Como ha podido saber LA RAZÓN, desde el verano la situación había empeorado aún más. Ya no sólo había rencillas entre hermanos y cuñados, sino que los más pequeños del clan, los nietos, también decidieron tomar partido. El pasado mes de septiembre, los nietos mayores de edad participaron en una reunión del consejo de administración de Samar Internacional SL, la administradora única y propietaria de la mayoría de las empresas del entramado familiar. El encuentro no terminó bien y ocho de los jóvenes se posicionaron en contra de su abuela. Es más, salvo los hijos de Vicente Jesús, el resto abandonaron el encuentro renegando de la matriarca. No querían volver a saber nada de ella. Este encontronazo fue uno más de los desencuentros económicos que se han dado en el seno familiar. Miguel López, su yerno, ingresó el viernes en prisión como su presunto autor de los disparos que terminaron con la vida de «Doña Carmen», como la llamaban sus vecinos.

En su declaración ante el juez, López alegó que la muerte de su suegra no le reporta ningún beneficio económico porque él es una persona «solvente». Como recoge Efe, López respondió a todas las preguntas y, con una actitud tranquila, insistió en su inocencia.

El sospechoso, que ingresó en prisión provisional y sin fianza por orden del magistrado de Alicante José Luis Lafuente, mantuvo, además, que nunca estuvo solo en los momentos en los que la víctima recibió los dos balazos a quemarropa que acabaron con su vida, sobre las 19 horas del pasado 9 de diciembre, en el concesionario de coches de Alicante que él mismo regentaba. Según su versión, el hecho de haber estado acompañado siempre por otras personas en esos precisos instantes le otorgan una coartada, aunque la Policía Nacional ha encontrado contradicciones respecto a lo declarado por varios testigos. Esas contradicciones se centran tanto en las actitudes que López mantuvo la misma tarde del crimen como en las referencias temporales que él ha proporcionado a los investigadores sobre sus movimientos. Así, el sumario refleja, por ejemplo, que la hora a la que el investigado dice haber llegado esa tarde a su domicilio no cuadra con otros testimonios recabados en el curso de las pesquisas. «Está claro que en algunas cosas ha mentido», apuntan las fuentes consultadas por Efe sobre el marido de la hija pequeña de la víctima, Fani.

En todo caso, la Policía mantiene como principal línea de investigación que habría resuelto matar a su suegra para impedir que ésta llevara a cabo ciertos cambios en la titularidad de las empresas familiares en favor de su único hijo varón, Vicente, y en detrimento de sus otras tres hijas. El encausado reconoció que cobraba un sueldo como gerente del concesionario Novocar inferior al que suele darse para un puesto de sus características en el sector y agregó que estaba en vía de paliar las pérdidas que había sufrido el negocio durante su gestión. Sobre la relación que mantenía con su suegra, aseveró que prefería «no tratarla», algo que coincide con las malas relaciones existentes en el seno de la familia que los investigadores han podido constatar.

LA RAZÓN se ha puesto en contacto con varios vecinos del municipio en el que se crió el presunto asesino, Benetússer, en Valencia. «No creemos que sea él, fue compañero de mi hijo en el colegio y tanto él como yo opinamos que no es posible que el culpable sea ese chico» cuenta uno de ellos. También aseguran que la madre de López se ha ido a vivir fuera de su pueblo «por todo este follón».

Mientras, al acusado le describen como «un chico tranquilo», no ocurre lo mismo cuando describen a su padre: «Tenía mala fama. Estamos seguros de que Miguel se fue de Benetússer por su culpa».