Sucesos
Muerte de Émile, el niño de dos años que desapareció en Francia: ponen en libertad sin cargos a los abuelos y tíos
Anne y Philippe Vedovini fueron detenidos el martes en el marco de la investigación por la muerte de su nieto, quien desapareció en julio de 2023 en una zona remota de Francia, entre Aix-en-Provence y Aubagne
Los abuelos maternos, Anne y Philippe Vedovini, y dos tíos del niño de dos años que falleció en 2023 en el sureste de Francia fueron liberados sin cargos esta madrugada, tras dos días bajo detención y varios interrogatorios. "Se va a retirar la detención de mi clienta", declaró Julien Pinelli, abogado de la abuela, a la prensa congregada frente a la sede de la Gendarmería de Marsella, donde los cuatro familiares permanecían arrestados.
La liberación llegó después de extensos interrogatorios individuales, que en el caso de la abuela se prolongaron durante 17 horas. Los familiares fueron mantenidos en aislamiento para evitar cualquier comunicación entre ellos, explicó Pinelli. "Han sido 48 horas largas y difíciles", añadió el abogado, quien destacó que la noticia supuso "un inmenso alivio" para su defendida.
El fiscal de Aix-en-Provence ofrecerá una conferencia de prensa al mediodía para informar sobre el avance de la investigación por homicidio voluntario y ocultación de cadáver. La detención de los abuelos maternos, un tío y una tía del pequeño Émile Soleil ocurrió en la madrugada del martes, como parte de una operación sorpresa en la casa familiar de La Bouilladisse.
Estos arrestos tuvieron lugar veinte meses después de la desaparición de Émile el 8 de julio de 2023, en la segunda residencia de sus abuelos en Haut Vernet, un pequeño pueblo montañoso en los Alpes.
Las autoridades desplegaron un amplio operativo de búsqueda sin éxito. El caso, muy mediático, no tuvo avances significativos hasta finales de marzo de 2024, cuando una excursionista encontró por casualidad un pequeño cráneo y algunos dientes que resultaron pertenecer al niño.
Este hallazgo cambió el rumbo de la investigación, que en un principio consideraba la posibilidad de un accidente o de que el niño se hubiera extraviado en el bosque y fallecido por causas naturales. Sin embargo, surgieron dudas sobre cómo un niño de dos años y medio podría haber recorrido por sí solo unos dos kilómetros en una zona montañosa con un notable desnivel.