Facebook creará un botón para expresar emociones más allá de «me gusta»

Facebook añadirá al «Me gusta» nuevos botones para expresarnos ante noticias que no desearíamos recibir.

Facebook ha escuchado definitivamente a muchos de los usuarios que reclamaban que esta red social, la más poblada del mundo, incluyera algún tipo de botón que se contrapusiese al ya tradicional «Me gusta». Un «No me gusta», «Dislike» en inglés. Tras numerosas especulaciones y rumores el CEO y fundador de la compañía, Mark Zuckerberg, confirmó ayer en un evento en el que se sometió a preguntas de los ciudadanos, que se pondrá en marcha esta demandada a la vez que polémica función. «Probablemente cientos de personas nos han pedido esto y hoy es un día especial porque es el día en que puedo decir que estamos trabajando en ello y que estamos muy próximos a iniciar las pruebas», afirmó en sus oficinas de California, donde se produjo el encuentro.

Esta decisión permitirá que los usuarios de la red social muestren su desagrado ante situaciones concretas o empatía y cercanía ante malas noticias que comuniquen otros usuarios. Así, cuando un amigo de un usuario publicaba por ejemplo que se había quedado sin trabajo o había perdido a un ser querido, la única manera de solidarizarse con él o mostrarle comprensión de manera rápida era «clickear» en el botón «Me gusta», no del todo apropiado para la ocasión. Según Zuckerberg, a través de las nuevas funcionalidades –que no necesariamente tienen que significar desagrado con algo o alguien– se podrán transmitir muchos mensajes: «Lo siento» sería uno de ellos. «El botón ‘‘Me gusta’’ es muy valioso, porque es una forma de expresar de manera rápida una emoción; sin embargo, existen más sentimientos que las personas quisieran expresar (...). Pronto sacaremos algo que conecta con las necesidades de una comunidad, porque no todos son momentos buenos», explicó.

Aunque el responsable de Facebook quiere evitar que los nuevos botones generen conflictos, lo cierto es que con un eventual «No me gusta» podrían producirse. De hecho, desde las redes sociales, algunos usuarios han advertido que será un foco de problemas sólo comparable con el famoso doble check de WhatsApp. Uno de ellos decía irónicamente que si a alguien le quedaba alguna amistad tras la instalación del doble check, probablemente la perdería con el nuevo botón. Se podrían generar situaciones incómodas; por ejemplo, que un usuario suba una foto propia o de un familiar y a uno de sus contactos –ése que siempre confunde la sinceridad con la grosería– no le dé reparo decir públicamente que no le gusta. Tampoco hay que descartar los conflictos por discrepancias políticas o ideológicas, que hoy se manifiestan fundamentalmente a través de los comentarios.

Estos son algunos ejemplos. Mark Zuckerber se refirió a la actual crisis de los refugiados. Así, el nuevo botón servirá para expresar que son noticias que realmente no nos gustaría recibir, que son noticias que no nos gustan.

Precisamente, de todas estas situaciones pretende huir Mark Zuckerberg con los nuevos botones que, insiste, que serán para expresar empatía con nuestros contactos: «No buscamos que los usuarios se sientan agredidos o atacados, sino acompañados. (...) No es el tipo de comunidad que deseamos crear».

Aunque para los usuarios pueda ser más o menos anecdótico el uso de los nuevos botones, la pregunta es ahora cómo puede afectar a las empresas presentes en esta red social y cómo pueden afectar a su reputación que los usuarios puedan expresar otro tipo de emociones con los contenidos que publiquen.

En cualquier caso, algunos expertos en redes sociales ponen en entredicho que la intención última de Facebook sea únicamente la de contentar a los usuarios que demandaban el boton de «No me gusta» desde que se instaurara en 2009 su antónimo. Muchos son los que creen que lo que el gigante de las redes sociales busca es mantener la audiencia y la actividad, de modo que pueda seguir facturando millones de euros por la publicidad que vende.

Sólo queda esperar a que se establezcan los nuevos botones y que los usuarios los usen y opinen. Será el momento de decirle a Zuckerberg, con o sin botón, si nos convencen o no sus novedades; si nos encantan o no nos gustan.