Polémica por las armas
The Liberator: la primera pistola impresa en 3D
Unas imágenes muestran las pruebas reales de fuego en pleno debate sobre las armas de Fuego en EE UU. Las impresoras capaces de realizar objetos sólidos tienen un precio de aproximadamente 6.000 dòlares
Al final se ha hecho realidad. La velocidad con la que evolucionan las nuevas tecnologías ha puesto en el mercado las impresoras 3D a un precio asequible. Ante la idea de crear objetos tridimensionales con una impresora en tu propia casa, algunos han optado directamente por la polémica: fabricar armas. Han saltado las imágenes de Cody Wilson en una prueba de tiro, con balas del Calibre 380, con la primera pistola impresa con la tecnología 3D Stratasys Dimension SST, a través de la BBC. Pero la historia es más antigua, esto pasó hace 8 meses.
Armas de plástico
«Defense Distributed» es el nombre del grupo no profesional que Cody Wilson, que se define como criptoanarquista, tiene con sus amigos. Y que está detrás de la idea de poder imprimir cualquier cosa que necesites desde internet. El proyecto, denominado «Wiki Weapon Project», les costó la friolera de 8.000 dólares en la impresora, pero a cambio consiguieron 20.000 (12.400 euros), a través de donaciones en su página web. La pistola es totalmente funcional y para su creación se han usado material muy sencillos. Toda esta hecha con plástico ABS menos la aguja percutora. Cuenta con un total de 15 piezas que llevan un acabado de acetona vaporizada para reducir la fricción generada con el uso. Esto implica que una sola arma puede realizar varios disparos, pero si la bala es demasiado potente podría destruirse, debido a la fragilidad de los materiales. La pistola ha sido bautizada con el polémico nombre de The Liberator ya que evoca a la FP-45 Liberator de la Segunda Guerra Mundial, que tenía un coste de fabricación muy barato y fue aprovechada por los EE.UU para repartirla en masa a las tropas francesas para que atacasen a las patrullas nazis.
Wilson, estudiante de derecho de 24 años en la Universidad de Texas, explica que «Queremos mostrar este principio: que un arma de fuego es imprimible». A su favor, la ley; por un lado posee una licencia de fabricante y vendedor de armas expedida por la Oficina de LAcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) de EE UU. Según dijo Donna Sellers de la ATF a la BBC, la pistola impresa es legal siempre que no entre en la ley Nacional de Armas, como las automáticas. A pesar de ello, aunque el percutor es metálico, le incluiría una pieza metálica para poder pasar el arma en el control de los aeropuertos. En el otro lado está la legislación americana que prohibió las armas de plástico durante dos décadas, pero dicha ley vence en diciembre de este mismo año.
El momento elegido no es el mejor, ya que aparte de el debate político y social alrededor del uso de las armas de fuego en EE UU, hay que tener en cuenta la reciente violencia en Aurora, Colorado, Milwaukee, Wisconsin y Boston. Aún así, en los sucesivos vídeos de Wilson se puede ver la fabricación de piezas para un rifle semi automático AR15.
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