Brote de ébola
Un kit chino para detectar el ébola en unas horas
Desde que el panel ético de la Organización Mundial de la Salud (OMS) diera luz verde al uso de algunos tratamientos experimentales, los laboratorios no han tardado en acelerar muchos estudios que estaban estancados, o en «stand by». Aunque la mayoría de los tratamientos son estadounidenses, los países del este también se han puesto las pilas. Además de una farmacéutica japonesa que está elaborando un antiviral, el Gobierno chino teme que el virus pueda llegar a su territorio y ya ha anunciado, a través del periódico oficial, «Diario del Pueblo», que el Instituto Genómico de Beijing ha elaborado un sistema de rápida detección del virus del Ébola. Es un set de detección portátil que se compone de una solución química que cambia de color si se mezcla con un ácido nucleico único en el virus. En tres horas, desde que se recoge la muestra, se conocen los resultados.
Pero el brote no sólo ha ayudado a acelerar esta investigación, como alerta la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de EE UU: «Hemos recibido varias denuncias de medicamentos fraudulentos que afirman prevenir el ébola o tratar la infección».
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