Una decisión definitiva para un problema temporal

Cada minuto se suicidan en el mundo 2 personas, una forma trágica de terminar con la vida, que impacta de manera intensa en los supervivientes, las otras víctimas, muchas veces olvidadas. En España las cifras de fallecimiento por suicidio son superiores a las causadas por los accidentes de tráficos, pero se les da mucha menos importancia. El suicidio es un tema tabú, sabemos que está ahí, aunque se prefiere no mentar, como si de meigas se tratara, y por ello se trata de manera esquiva, cuando no ciertamente negador.

El suicidio aparece íntimamente ligado a la desesperanza. Cuando el futuro carece de perspectiva y la persona se ve ahogada por las circunstancias, entonces puede parce tener sentido el finalizar con la existencia. Pero en realidad es una decisión definitiva, para un problema que solo es temporal.

No es igual de relevante en todas las edades. La mezcla de la desesperanza con la impulsividad, es una combinación peligrosa que se da especialmente durante la adolescencia. El suicidio se sitúa entre las primeras causas de muerte en estas edades. Durante esta etapa todo se vive con intensidad y no se han desarrollado suficientes estrategias para afrontar muchas de las exigencias de la vida, con lo que el estrés suele ser una característica común.

También es importante como los medios tratan este asunto y como lo hacen en series o películas. Un interesante ejemplo lo encontramos en la producción “Por 13 razones”, una serie que trata del suicidio de una adolescente, que aumento la tasa de suicidios en Estados Unidos, cuando posiblemente manejada de otra manera, podría haber sido útil en la prevención.

A pesar de las muchas investigaciones y de los más de 3000 artículos científicos publicados al año, no encontramos ante el reto de ser capaces de predecir el riego de que surjan este tipo de conductas. La prevención, como en otros campos de la medicina, es de crucial importancia.

* Doctor en Medicina. Especialista en Psiquiatría.